Encuentro (Privado)

Salí de la clases de matemática, por fin pude salir de allí. No había nadie el pasillo, supongo que todos se fueron para la cafetería y el jardín.
-Creo que sera mejor que me quedé aquí-
Dije en voz baja mientras me sentaba contra una pared, juntando mi piernas.
Suspire y meti mi mano en el bolsillo de mi falda. Saque un par de caramelos. Me encanta comer cosas dulces, y ahora lo necesitaba, durante todo el dia, por alguna razón, tube un mal sabor de boca. Abrí uno y me lo comí.
-Dulce-
Dije mientras sonreia al comerlo. Y termine estirando mis piernas.

Riku estaba tirado bajo un árbol descansando, después de todo el profesor había faltado y era bueno un poco de tiempo libre. Pasaron las horas, hasta que se cansó de que lo piquen los insectos y se levantó de ahí.

Mientras caminaba sacó una cajetilla de cigarros para prender uno. Si bien las reglas del Instituto no lo permitían, el mal hábito era más fuerte. Caminó un buen rato mientras daba ligeras pitadas, hasta que vió que 2 preceptores se acercaban hacia él. Decidió correr y se metió por la primera puerta que encontró, que era la que conectaba el pasillo con el patio.

-Eso estuvo cerca... -dijo un poco agitado-

En éso de lo que habló su cigarro calló al suelo.

-Demonios...

Un joven entró corriendo aquí. Estaba exaltado, seguro que corrió. Mire hacía el pisó, se le calló un cigarro. Estaba fumando, ahora entiendo por que corrió.
-Debés tener cuidado-
Tome el cigarro y lo rompí contra el piso. El olor a ticotina me disgusta mucho. Alce la vista y lo mire fijo.
-Es malo para tu salud-
Mi voz era tranquila, pero mi rostro serio. Para mi, la salud, era algo con lo que no se debía jugar. Aunque pude ver que a ese chico no le importaban mis palabras.
-Podrias morir..-
Mire hacía adelante de nuevo, mientras decía eso en un susurro.

La agitación terminó y su pulso volvió a la normalidad. Al alzar la vista vió a una chica que rompía el cigarro en el medio de su rostro.

-Es malo para tu salud!- Le gritó la chica.
-De todos modos ya no servía.. -dijo en tono cómico-

Se acomodó un poco la remera y se tronó los dedos. La chica seguía hablando, pero no prestó atención. Lo único que llegó a escuchar fue un 'podrías morir' a lo que respondió.

-La muerte no es algo que me de miedo.

Metió sus manos en los bolsillos y siguió caminando, dándole la espalda a la muchacha.

Por fin respondio, su tono de voz sin duda me molesto. Y luego dijo -La muerte no es algo que me de miedo- y me dio la espalda.
-Las personas que dicen eso, son las que buscan enfrentar a la muerte en la cara, por wue su vida no les gusta-
Gire mi vista y lo mire.
-En otras palabras, seguramente eres mas debil de lo que pareces y lo que piensas, por cuestiones que no se, y por eso buscas formas de liberarte de eso. Si me equivoco, corrigeme-
Mi cara y mi voz, parecía que no me importaba en los mas mínimo.

-Es algo que me da igual.

Siguió caminando, hasta llegar a mitad del pasillo. Se detuvo y sacó un chicle del bolsillo y lo empezó a comer. Mientras ésto pasaba ella seguía hablando. Ella lo llamó débil, y quería librarse de éso.

-Solo me parece aburrido todo ésto. Como sea... -Dijo mientras levantaba la mano haciendo una especie de saludo, y continuó caminando con las manos en los bolsillos.

Ese chico se hacia el rebelde, y eso me hizo soltar u a risita.
-entonces no quieres tus cigarros de regreso-
Dije lanzando para arriba y volviendo a atrapar una caja de cigarros, que le habia sacado cuando no lo noto.
-Los quieres?-
Dije miendolo seria y voz tranquila

Caminaba y escuchó que le dijo si no quería el paquete de cigarillos de nuevo. Metió la mano en el bolsillo y confirmó que evidentemente se los había sacado.

Se dió vuelta y vió como jugaba con su caja, a lo que, en manera provocadora se podría decir, le dijo si los quería.

-Si éso me va a matar según tú, ¿no deberías tirarlos? -Dijo y largó un suspiro, esperando respuesta.

Por fin se dio vuelta y me hablo mirándome -Si éso me va a matar según tú, ¿no deberías tirarlos? -Me dijo y suspiro. Deje de jugar con la caja y la sostuve. La mire un rato y luego lo vi a el.
-mm...-
Suspire cortamente y le lance la caja hacia el y lo vi atraparla.
-Ábrela si quieres ver tu respuesta-

Le lanzó la caja y él la atrapó en el aire, la podía sentir un poco más ligera, tampoco es que pesara una tonelada, pero uno se da cuenta cuando falta algo.
Ella pidió que la abra.

-¿Para qué? ¿Acaso me robaste los cigarrillos para fumártelos tú? -Dijo largando otro suspiro.

Se dió vuelta y caminó, dando el mismo saludo que dió la otra vez.
-Ja ne...

Para que yo me los fume? Ese chico sabía como responderle a la gente, apusto a que los profesores no le sacan el ojo de en cima.
-Solo los tire-
Finalmente me pare y me acerquea el.
-Hey...-
Puse mi mano en su hombro y lo hice darse vuelta. Tome una de sus manos, meti mi otra mano mi bolsillo y saque caramelos, los puseen su mano.
-Tomalos, para enmendar que te saque tus cigarros-
En mi rostro se dibujo una pequeña sonrisa de lado.
-Ademas son mejores para tu salud-

La muchacha dijo que los tiró. Luego se acercó a él tocándolo en el hombre y haciéndolo voltear.
Metió la mano en sus bolsillos y sacó unos caramelos, y luego se disculpó.

-No me gustan las cosas dulces... -Dijo rechazando lo que le había ofrecido. -Y de todos modos tengo más cajetillas en casa -Añadió.

Se giró quitando la mano de ella de su hombro.

-Y mi salud no es algo que me importe demasiado, a decir verdad.

Mi sonrisa no tardo mucho en desaparecer. Su cometario sobre su salud sin duda me habia molestado un poco.
-Deveria preocuparte, o si no sera otro de esos chicosque no les importa nada y despercian su tiempo de vida como si nada, sin darse cuenta de que podrían morir mas rápido de lo que creen-
Suspire y puse mi mano en su cabeza para que me viera y está vez me escuchara.
-Oye bien, la vida ya es difícil por si sola, sin duda aguna es como jugar a la ruleta rusa, nunca sabes cuando te tocara la bala. Pero al menos de esta forma tienes una posibilidad de sobrevivir. Sin embargo, lo que tu haces es directamente aceptarlo todo, y hacer tu propia ataúd. Y resulte dificil de creer que tu eres la clase de chicos débil que acepta de esa forma la muerte?

-No es algo que me preocupe... -Dijo terminando con un suspiro-

La voz de ella se notaba algo apagada, como si estuviera decepcionada. Le dijo algunas cosas, demasiadas para él. Suele ignorar a las personas generalmente, y éso fue lo que hizo.

Luego le dió un discurso sobre la vida, de que era difícil y que era débil y otras cosas más.
Riku se dió vuelta y la miró a la cara.

-¿Acaso nunca te callas?

Me mira, y me pregunto si acaso nunca me callaba? Me sorprendi, es ciero, estoy hablando mucho con el, yo nunca lo e hecho, siempre e preferido no hablsr con la gente. Hasta a mi me resulto extraña.
-Lo siento...-
Me aleje de el, tome algunas cosas que habia dejado en el piso donde me habia sentado y caminé.

-Descuida.

Luego de decir eso vió como ella volvía para atrás y recogía sus cosas. Es cierto que había sido algo grosero, pero después de todo el no era una persona muy sociable.

-Riku, por cierto. -Dijo y siguió caminando por el pasillo, para irse de una vez de ahí.

Me dijo su nombre, así que era Riku. Me di vuelta rápidamente para poder responder. Pero el ya se estaba marchando. No estoy muy segura que debo hacer.
-Ah!...-
Corrí tras el y lo tome de la manga de su remera. Respiraba muy rápido y mi cara estaba algo roja.
-Soy Yume, es un placer-
Dije finalmente algo exaltanda.

Sintió como recogió sus cosas y luego algunos pasos corriendo hacia él.
La chica lo tomó de su manga, y se presentó como Yume. Él dirigió la mirada hacia ella y pudo ver como estaba roja como un tomate.

-Así que Yume, eh? -Río al ver su cara tan roja.

Caminaron unos minutos y la barriga de él empezó a sonar.

-Tengo hambre... -Susurró, pero siguió caminando restándole importancia.

Oi sonar su estomago y decir -Tengo hambre...- Aunque siguió caminando sin importarle mucho. Yo me quede unos segundos pensando y luego abrí mis ojos sorprendida.
-Cierto, espera aqui un segundo-
Salí corriendo de allí a gran velocidad. En cuestion de segundos volvi con un algunos sándwich.
-La verdad, es que los traje por que si, no tenía pensado comermelos. Tu los quieres? -
Dije extendiendoselos.

Lo soltó y sacó un paquete de su mochila, pero él siguió caminando. Eran sándwiches, los cuales le ofreció.
Se quedó callado, le molestaba recibir favores y si los comía sentiría que le iba a terminar debiendo algo.

-Ammm...estoy comiendo chicle, no puedo comer un sándwich -Dijo en tono burlesco.

Su estómago volvió a sonar y miró hacia abajo apenado.

Rechazó los sándwiches, asi que los seguí sosteniendo. Entonces escuche su estómago sonar de nuevo y el bajo la vista apenado. Me sorprendi un poco y luego afloje mi vista. Volví a extender mi mano con los sándwiches.
-Puedes tirar el chicle y comerlo. Es solo comida, no hace falta ser tan orgulloso-
Dije con voz tranquila, mientras lo observaba. Estaba esperando que los tomara y que levantara la vista del piso de una vez.
-ya, tomalos-

Insistió en que los tomara, pero se quedó callado. La campana sonó, era hora de volver a casa.

-Será otro día parece.

Metió las manos en sus bolsillos y abrió la puerta que daba hacia el patio. Quizá pararía en algún lugar a comer de parado, o preparar algo de ramen, cosa que adoraba.

-Supongo que acá me despido...

Toco el timbre y la puerta que daba al patio la abrió.
-Supongo-
Metí una de mis manos en el bolsillo de mi campera, mientras que con la otro sostuve los sándwiches.
-Nos vemos, Riku-
Me di vuelta y camine para el salón. Tenía que ir a buscar mis cosas.

Sonrió y cruzo la puerta.

-Ja ne -Y levantó 3 dedos como haciendo un gesto de despedida.

(OFF: No sé si quieres seguir xD Contesté por si quieres, sino no hay drama n.n )

(Off: no, así esta bien)