Blanca Navidad (grupal alexia, Ranmaru, Alexander, Elioth)

Cuando me acerque a mi novio me dijo que la hermana del orfanato donde había crecido quería conocerme, no pude evitar sorprenderme, jamás me había contado que creció en un orfanato ni quiera cuando nos conocimos. Eso comenzaba a preocuparme, tome el tubo del teléfono y hablé un poco con ella. Una mujer realmente encantadora, me preguntó como estaba con quien pasaría la navidad, escuchaba de fondo a los niños reir, correr. Me dio cierta angustia pero al menos alguien pasará la navidad con ellos, quisiera hacer algo por ellos.

Fue entonces cuando recorde que mi padrastro me regaló dinero para que me maneje por un tiempo o hasta que encuentre un empleo aqui, renunciar a toda una fortuna de la noche a la mañana no es fácil.
-sabe, vengo de una buena familia y se que los niños lo apreciarían más les donaré el dinero que tengo, se lo haré llegar a através de Ranmaru, es una promesa..o no no, lo hago por gusto.. si no se preocupe a mi familia le sobra- a ellos si, a mi ya no - claro, usted tambien que tenga una feliz navidad - le devolví el teléfono a Ranmaru sorprendido ante mi gesto pero mientrás el se despedía Alexander me tomaba del brazo diciendo que compraríamos las cosas para la cena de navidad.

Sin pensarlo subí a la camioneta y nos pusimos en marcha. Debería sentirme feliz de que varios niños tuviesen algo lindo esta navidad, pero me preocupaba más el hecho de darme cuenta que no sabía nada de mi novio, sin embargo el sabía todo de mi. Suspiré, cuando Alexander me preguntó donde quería ir primero, ni había pensado que regalaría sólo se que del dinero que me dieron acabo de donarlo todo excepto lo que deje para los regalos, lo cual no era mucho. Comencé a meditar cuando vi una tienda de ropa que mostraba un bello vestido de navidad -esperame aqui un momento- entre a la tienda y me probé el vestido. Salí del vestidor cuando vi a Alexander que me miraba sorprendido -y dime, cómo me queda? -





Luego de probármelo le pregunté el precio al vendedor pero era excesivamente caro, por más hermoso que era mi intención de vestirme navideña para repartir los regalos este año deberé posponerlo.

Mi corazon latíaa mil revoluciones cuando ella apoyo su cabeza en mi pecho, la abrace un instante aprobechando que su hermano había salido.
Diablos! no pense en darle algún regalo, se lo merece, pero claro Cherice fue a comprar comida, podría pedirle que me compre un regalo para Alexia, ella es mujer y es su amiga dará con el regalo perfecto- ¿quieres que te ayude con algo bonita?- le dije besnadola dulcemente a los labios.

Mientras ella se dirigía a prender la fogata saque mi celular y le mande un mensaje a mi hermana "olvide comprarle un regalo a Alexia, puedes comprarme algo bonito para darle? si salgo sospechará y quiero que sea sorpresa. Tu la conoces se que comprarás lo indicado".

Fui a ayudar a Alexia cuando vi a mi tan preciado "cuñado" entrar con aire de pesadumbrez a la casa -y a ti que te pasa? - le pregunte restandole importancia -temes que te cambien por alguien mas guapo? - rei ante el comentario pero creo que a Alexia no le hizo mucha gracia el hecho de que su amiga este sola con su hermano. ¡Si que son celosos entre ambos!

Ignore la respuesta de Ranmaru y fui a buscar la leña que Alexander había separado para ayudar a Alexia a pender la fogata, de paso los dejaría que hablen creo que ella puede darle un mejor consejo al menos a ella le agrada el pelirojo.

¡Oh por...! Estoy segura que mis latidos podían escucharse hasta el otro lado del mundo, tanta cercanía con Elioth me pone nerviosa, feliz, pero nerviosa a la vez, cuanto agradezco que Sasha no este aquí en estos momentos. Un momento... si vamos a celebrar la navidad ¿no debería comprar algo para los demás? Oh eso puede ser un problema... todavía entre los brazos de Elioth, lo pienso, lo pienso y me lo pienso hasta que doy con la solución, puedo pretender ir al servicio unos momentos y decirle a mi secretario que vaya a por los regalos y me los traiga, ¡si! es una gran idea. Luego la pregunta de Elioth llegó a mis oídos y luego mi color aumento al sentirlo besarme.

-¿Podrías ayudarme a prender la chimenea?-

Exclame recargando mis mano levemente en su pecho, le sonreí y me aleje a empezar a acomodar la leña, solo una vez ayude a prender esta cosa, y eso por que me daba miedo que me quemará cuando la madera empezará arder, pasados unos minutos la puerta se abrió y mi hermano entró junto con Cherice, aunque el tiene una expresión peor que la de mil demonios, suspire al verlo llegar con ella, este pedazo de tonto. La forma en la que se lleva con Elioth me causa gracia, supongo es la primera vez que Sasha se lleva bien con un hombre... sin haber empezado a coquetearle... es buena MUY buena señal.

Y contra todo pronostico Ranmaru se quejó me asombró aquello así que sacudí mis manos para acercarme a él, Elioth podría terminar de prenderlo todo, sujete mi cintura y lo miro, lo miro y lo miro, y suspira ante todo el tiempo que le dedique mi atención.

-Conces a mi hermano, no deberías preocuparte por algo que no sea que sea que intente hacer que Cherice termine contigo. Tu también como yo sabemos que a Sasha solo le atraen personas mayores-

Tuerzo un poco el gesto, ante las negativas de él, molesta alzo la mano y me alejo, es una buena excusa para realizar esa llamada, solo que en lugar de ir al baño voy mi habitación a cambiarme de ropa, tomo mi móvil y marcó. Suena, suena y finalmente atiende, rápidamente le indico que necesito que vaya a por mis regalos. Lo pienso, lo pienso y lo pienso hasta que decido que regalarles.

Para Cherice pido enorme peluche de oso acompañado de un elegante vestido que recién había visto en una tienda. Para Elioth pido un elegante sacó nuevo y una colonia que había empezado a promocionar una de las jugueterías. A Ranmaru... mmmm vaya ¿a él que podría darle? Rendida opto por comprarle una nueva gabardina, seguro que es feliz. Y finalmente a mi hermano, sonrío ante la cara que pondrá por su regalo, y le indico a mi secretario que sabe que comprar para mi hermano. Se ríe y cuelga, satisfecha con lo que he hecho cuelgo, y me giro para ver el vestido que ahí en mi cama ¿es una broma, verdad?

Spoiler:

Salgó de mi habitación usando el vestido que había en la cama, con la dulce nota "Espero goces la navidad, Ali" lo mató juro que remato a mi hermano, se me ha adelantado con la broma de este año.

Entro a una tienda y ahí estuvo un rato hasta que volvió con un vestido rojo con peluche en el cuello, brazos y falda, la vi de arriba a abajo, si tan solo fuese unos años mayor, sería completamente mi tipo, me pregunto como se veía y alcé en pulgar afirmativamente, cuando iba a preguntar el precio su gesto cambio, y sin pensarlo me acerque a pagar -Cargelo a la cuenta "Gienevich" por favor- Me miraba incrédula, al parecer aquel era un precio prohibitivo para ella le sonreí y al entregarle el vestido para que volviera a ponérselo agregue: -Consideralo mi regalo de navidad-

La empuje levemente para salir de la tienda e ir en busca de los regalos, su teléfono sonó y tras atenderlo seguimos la marcha. Pasado un tiempo me encontraba cargado de bolsas, no iba a permitirle cargar nada estando yo ahí, minutos después nos encontramos con mis compañeros del ejercito que me entregaban lo necesario para la cena ¡más bolsas! No iba a quejarme, pues teníamos que hacer creíble la mentira de que fuimos por la cena.

Al llegar de nuevo a la casa, pase a dejar los regalos a un armario desde la puerta trasera, y aproveche para dejarle a mi hermana su "regalo" de navidad, regrese y entre por la puerta principal con la cena en las manos, me mataban los hombros, el maldito pavo pesa demasiado. El comentario de Elioth me hizo reír. -La cosa es que no ahí nadie más guapo que yo, soy un ruso mitad japones, albino de ojos-bicolor. No ahí nada más sexy que eso- Sonreí de medio lado, hubo un momento en el que deje de ver a mi hermana pero no me preocupe.

Al verla salir de su habitación más roja que su cabello no pude evitar reír a carcajada limpia -¡JAJAJAJAJAJA! ¡No creí que en realidad te lo pondrías! Jajajaja te queda mucho mejor de lo que imagine, jajajaja, supo... jaja...supongo que...jaja ganó yo... jaja este año Ali... jajaja- No podía parar de reír, pues en verdad no creía que mi dulce hermana, usaría ese traje tan ridículo.

¡Vaya! Jamás me hubiera imaginado ese gesto por parte de mi novia, supongo que de algún modo le entró sentimiento al escuchar a los niños al teléfono, antes de que se fuera completamente alcancé a tomar su mano para susurrar: -Cuándo regreses prometo decirte la verdad, pequeña- Se alejó y suspirando entre en la casa, el fuego estaba prendido lo que nos proporcionaría algo de calor.

Me quede pensando en una realidad bastante preocupante hasta ahora, solo tengo regalo para Cherice, ¿debería darle regalos a los demás también? ¿les dolerá mucho si les doy un sencillo regalo? No tengo tiempo para ir a buscar algo muy ostentoso, cuando llegaron Cherice y Alexander mi gesto se descompuso, no me acostumbro a ver a mi novia en compañía de ese sujeto, no me agrada nada. Y Alexia lo notó pues se acercó a mí -Mira no me interesa lo que intente o no tu hermano, me basta con saber que quiere golpearme, como para tener que preocuparme por que intente que Cherice termine conmigo. Ni tú ni el van a jorobarme la navidad ¿quedó claro?- Me alejó de ella para ir a sentarme al sillón más cercano que encontré y fue cuando Cherice se acercó a mí para que le contará, tal como se lo había prometido.

-Antes que nada... perdona por no habértelo dicho antes... pero es algo que no le tome mucha importancia de saber de mí- Retire un mechón de su rostro antes de continuar -Mira mis padres jamás fueron un ejemplo a seguir. Ni siquiera tenían planeado tener hijos y al nacer yo les jorobe la vida. Mi padre se la pasaba todo el día fuera jugando, y mi madre solo podía quedarse a cuidarme por que no le quedaba de otra. Ya que no acostumbraba salir a jugar con otros chicos por que se la pasaban burlándose de que mis padres no me hacían caso, me hice retraído; llegado un momento, cuando yo tenía cinco años o menos no recuerdo, mi madre me botó en un orfanato, para poder volver a ser feliz. En ese entonces, era un orfanato únicamente para niñas... creo que de ahí salio el que me haya hecho demasiado caballeroso y de alguna forma un imán de mujeres, no solía jugar mucho con ellas por que luego de un tiempo, se aburrían y se iban. También eso me dejo marca, por que al entrar a la escuela no me quedaba con un solo grupo de compañeros, por temor a que se aburrieran de mí. Como mis padres o las niñas del orfanato- Tome aire y la volteé a ver, su expresión decía más de lo que podía imaginar -No negare que mi tiempo en el orfanato fue mejor que mi vida con mis padres, pero no me sentía cien por ciento feliz ahí, la única fecha que en realidad gozaba era la navidad, por que la hermana Wilma hacía eventos de caridad y así era capaz de darnos regalos a todos, ella precisamente fue la que me regalo estas cadenas- Le muestro las cadenas que ahí en mi pantalón y agregó -Ella me dijo "Puedes tomar el camino que quieras para seguir, solo asegúrate de estar bien acompañado" Por mucho tiempo intenté hacerlo pero no podía estar mucho tiempo junto a alguien... y... por favor no me odies por decirte esto pero...- Tragué saliva ante lo que estaba apunto de contarle por primera vez a alguien, y más siendo mi novia -La verdad es que nunca me intereso en verdad Alexia... solo quería probarme que podía estar junto a alguien lo suficiente como para comprobar que mi trauma se había ido... aunque eso con llevará a lastimar demasiado a alguien que realmente se había encariñado conmigo-

Alborote mi cabello y escondí el rostro entre las rodillas, ¡ya lo hice, lo dije! Me quitado ese peso de encima.

Alexander vio la expresión en mi rostro y se ofreció pagarme el vestido- oh no, de verdad no lo hagas, no es necesario- le dije intentando detenerlo pero el me dijo que lo considerase como un regalo de navidad. Con los ojos llorosos -Al..- le dije para llamar su atencion para lanzarme en sus brazos y darle un fuerte abrazo- gracias.. en veradad- malditas fechas me ponian extremadamente sencible.

Continuamos con las compras ¿qué podría darle a Alexander que sea tan bueno como lo que me acaba de dar? Comence a pensarlo cuando vi en una tienda una hermosa colonia que la compre para mi novio junto con el note 2 bellos colgantes, uno con forma de corazon en el cual habia una pequeña ranura donde cabria una llave, y el segundo colgante era la llave de ese corazon. Me parecio un hermoso gesto comprarlo. Así lo hice.
Luego compre unas cuerdas de violín nuevas para mi amiga, un reloj para ELioth (en Italia descubrí que le encantan) queda Alexander y el de Elioth para Alexia. Diablos que son difíciles. Mientras Alexander se distraía comprando el sus propios regalos entre a una tienda de peluches ¡claro! peluches! tengo que comprar el regalo de Elioth para Alexia ese tonto solo le comprara a su novia y quedará mal con el resto, le compre una navaja suiza a Alexander, supongo que un hombre le regale eso a otro hombre está bien, un llavero con la bandera de Rusia para Ranmaru, y Ali.. Ali.. comencé a mirar los peluches y vi un hermoso tigre de bengala gigante muy similar al de ella, sin duda eso le encantará, puse algo cursi en la tarjeta y listo! me recibo de la mejor hermana del universo!
Quedaba el mayor problema ¿que darle a Alexander? supongo que otro peluche pero cual? Entonces lo vi!
Un hermoso oso blanco de peluche con un trajecito militar, no podía ser más perfecto! compre todo y quise llevarlo a la camioneta pero Al no me dejo.
Luego de ver a sus amigos militares llevamos todo hacia la casa.

AL llegar a ella pude notar que comenzaron a meterse con Ranmaru lo que me hizo suspirar que estuviese enojada no significa que permitire que molesten a mi novio, luego tendria una larga charla con mi hermano.
Me acerque a Ranm en busca de la explicacion que me prometio. Lo escuche atentamente y no se que clase de cara habré puesto pero ahi esta el baldaso de agua helada como la nieve que caía. No sabía como reaccionar ante aquello. No podía decirle que lo entendía porque no era verdad, no podía aprobar lo que hizo porque no lo hacía. Simplemente acaricie su cabeza en silencio, lindo regalo de navidad acabo de recibir. Como reaccionar ante aquello? solo mire a mi amiga que estaba muy bella con la ropa que su hermano le dejo.
La veía tan feliz, diablos! no puedo cargar con semejante secreto!

Cuando termine de encender la fogata ayude a Alexander con las bolsas y las pusimos en la cocina -sabes cocinar? porque puedo prepararlo sin problema- le dije quitando lo necesario para comenzar la cena. El estuvo de acuerdo y nos pusimos manos a la obra -oye recuerdas de la chica que estaba enamorado, la que te hable hace un mes atrás?- evitaba su mirada pero creo que debia decirle que mis intenciones con su hermana eran honestas.

El iba a responderme cuando vimos que Ali bajo con un bello vestido navideño, realmente me dejo perplejo mientras Alex se descostillaba de la risa yo no podía dejar de mirarla, me acerque a ella como serpiente encantada -estás.. despampanante- le dije encantado realmente era hermosa y sin duda me tenia encantado.

Corri hacia donde estaba mi hermana con su novio y la tome por la muñeca alejandola de el unos segundos- dime que compraste un buen regalo- le dije a mi hermana que estaba palida- que te ocurre? te encuentras bien?- me preocupaba verla asi.

Ante la risa de Sasha confirme que realmente gozaba viendo el estado en el que estaba, y confirmaba que mi regalo sería mucho mejor que el que él me dio, Elioth dijo que me veía despampanante y eso solo ayudo a que mi sonrojo creciera más y más. Con un asentimiento de cabeza agradecí su gesto, vaya que tiene valor si me dijo algo así frente a mi hermano, ¿Debería dejar de ser tan arisca y aceptar su propuesta de ser su novia? Una parte mía quiere aceptar, pero sigo con la dubitativa.

Iba acercarme a Cherice pero con solo escuchar las últimas palabras de Ranmaru fue como si hubiesen puesto un escudo alrededor de ambos, pues no fui capaz de dar un paso más, Elioth tomo a Cherice por la muñeca y le pregunto algo pero, yo no podía moverme... ningún podía hacer nada... no esperaba escuchar aquello, Sasha lo noto y se acercó a mí.

-N-necesito ir al baño, creo que me ha venido la regla Sasha-

Sin reprocharme nada, me dejo marchar y solo llegar al baño me deje caer sobre el vater, sujetando mi cabeza ¿Jamás le interese? ¿Acaso para él yo solo fui un burdo juguete? Tres años diciendo que era lo mejor que jamás le sucedió ¡¿Fueron una burda mentira también?! Había empezado a llorar, eso sin dudarlo, lloraba a mares, pero algo quedo claro. Si antes todavía tenía un sentimiento hacía el ahora estoy segura que realmente lo odio.

Luego de haberme reído un poco por la apariencia de mi hermana, deje que fuese Elioth a elogiarla, no soy precisamente un hermano que vaya a hacer bromas sencillas cuando todos los años nos superamos mucho más en cada broma. Entre tanto con Elioth ayudándome a hacer la cena descubrí sus dotes culinarios, eso es bueno, bastante diría yo, me agrada más este chico, pero necesita demostrar todavía más si quiere llegar a mi hermana.

Aunque admito que de pronto note a Ali algo tiesa ¿dónde quedó su alegría de hacer segundos? Me acerque a ella abrazándola para poder llegar a su oído -¿Sucede algo malo princesa?- Menciono algo de su periodo, bueno eso explica bastantes cosas así que no tengo inconvenientes en que vaya un momento al baño, cuando me volví a los demás regrese a la cocina para seguir haciendo la cena, por lo que tome el cuello de la playera de Elioth y lo arrastre dentro -Andando romeo, ahí una cena que terminar en menos de tres horas y TÚ tienes un pavo que cuidar en el horno-Lo cierto es que con el horno de esa casa el pavo estaría listo en menos de una hora, pero necesitamos estarlo volteando.

Luego de contarle aquello solo sentía la mano de mi novia acariciar mi cabeza, supongo que acabo de jorobarle la fecha con lo que le dije, no podía alzar la vista, realmente no podía. Llevaba AÑOS guardándome aquello y justo ahora se me ocurre soltarlo, soy un completo idiota, no se que podría hacer ahora para cambiar un poco las cosas ¿Ayudar en la cocina? No, los dos me odian y solo les daría una excusa para hacerme de cenar junto al pavo.

Me quede en dónde estaba sin moverme ni un poco, no me conviene, puede que haga algo de lo que me arrepienta, me deje caer en el sillón y luego de que Elioth separó a Cherice de mí me pare y salí a tomar un poco de aire, lo necesito urgentemente. -No hiciste nada malo... ya lo contaste...no hiciste nada malo Ranmaru...- Pero aunque trate de convencerme de eso se que hice algo malo.

Continuaba pasmada pero creo que mi hermano me volvio a la realidad, simplemente asenti con la cabeza ante su pregunta antes de que Alexander se lo llevase a la cocina no sin antes ver el rostro de Alexia, claramente lo habia escuchado, oh no!! Con el corazon en la boca subi al tocador a ver a mi amiga -Ali por favor abreme, Ali no es lo que crees - golpe la puerta lo mas normal posible para no llamar la atencion de nuestros hermanos
-Alexia por dios abre la puerta - me estaba empezando a desesperar ante el hecho de que estuviese alli encerrada con Alix y semejante noticia, si tenia algo de esperanza de que ambos fuesen amigos y se reconciliaran la he perdido y no solo eso perdi sino la confianza en mi novio. GENIAL.

A pero no, esto no iba a quedar asi. Baje rapido las escaleras en busca de Ranmaru - RANMARU! - le grite por sobre la nieve el volteo a verme, disculpame, realmente pero debo hacerlo. Levante mi mano y le di un bofeton, creo que el mas fuerte que he dado en mi vida -TONTO! ALEXIA TE HA ESCUCHADO Y ESTA ENCERRADA EN EL BAÑO! ESTO ES TU CULPA DEBES ARREGLARLO- estaba completamente enojada, yo tambien me sentia usada, las lagrimas brotaban en mi rostro pero no le daría el gusto, oh claro que no.

-DEJA DE MIRARME VE A ARREGLAR ESTO SI NO QUIERES QUE SE LO CUENTE A ALEXANDER-
"contarme que?" la voz de Alexander me hizo voltear temblorosa, jamas habia visto la expresion que tenia en aquel momento, fria, inexpresiva, escalofriante.
Creo que realmente en ese momento no sabía que decir.

Rei ante el comentario de Alexander  y fuimos a la cocina a terminar de preparar la cena, conversamos un rato mientras poníamos el pavo al horno cuando escuchamos que Cherice elevaba un poco la voz lo que me llamó la atención. Fuí al living a ver que ocurría cuando la vi bajando como un tiro las escaleras hacia afuera donde se encontraba Ranmaru. Escuche el ruido d ela campana de ver el pavo y Alexander me llamó una vez mas se acercó y ambos vimos que discutían creo que simplemente era una discusión de pareja -vigilala, me preocupa ire a dar vuelta el pavo- le pedi a Alexander, por mas pelea de pareja que fuese no me agradaba que ese imbecil se metiese con mi hermana.

Di vuelta el pavo, la cena estaría lista en cualquier minuto.

Ya no lloraba, solo trataba de que mi cabeza procesará lo sucedido, Cherice tocaba la puerta, tratando de convencerme de que no era lo que yo creía. ¿Qué es entonces? Por que para mí es una clara declaración de que Ranmaru solo jugo conmigo, es eso lo que yo veo. Alborote mi cabello respirando a bocanadas, también por alguna razón no siento que Alix esté molesta, casi hasta puedo jurar que la siento a mi lado abrazándome, "¿Todo en orden Alexia?" Es lo que quiero creer, digo...no estás enojada... no te siento enojada... y... yo tampoco lo estoy "Por qué no ahí motivo para enojarse" ¿No lo ahí? Pero si Ranmaru acaba de decir que solo jugo conmigo "Nos dio la razón que queríamos para odiarlo" Es verdad, ahora realmente lo odio, por haber hecho lo que hizo... ¡Jaja! Lo odio, realmente lo odio. "Podrías hacer realidad el deseo de tu amiga, ahora que lo odias, no le veo inconveniente a que entables amistad con él" Ya no tengo la preocupación de volver a quererlo.

Enjuague mi rostro para quitar el rastro de las pocas lágrimas que caían por él y sonreí al ver que parecía que jamás hubiera llorado, mi excusa de la regla va a funcionar de maravilla, al bajar escuche gritos afuera, no le tome importancia así que fui a la cocina dónde estaba Elioth cuidando el pavo.

-¿Mi hermano te ha dejado el pavo?-

Antes de que pudiera responderme la puerta se abrió mostrando a Sasha, por su expresión asumo que no esperaba verme tan recuperada, le guiño un ojo y se relaja, sabe que se lo explicare cuando estemos solos. Voy a fuera dónde están Cherice y Ranmaru y les pido que entren, por que por alguna razón quiero entregarles ya sus regalos, fui a la puerta trasera a recibirlos, y cuando los vi a todos sentados en la sala cada quién con su propia expresión de sorpresa les sonreí y empecé a repartir regalos, empecé por Cherice, dándole su vestido y su oso, luego Elioth, dándole su saco y la colonia, y al final deje a Ranmaru con su gabardina y a Sasha.

-Una firma de paz, ¿Te parece?- Ante su expresión se que no se esperaba eso, luego fui con mi hermano -Anda, que quiero ver tu cara cuando lo abras-

Supongo que debo decirte gracias, Alix, por hacerme ver que lo odio, y que puedo hacer feliz a Cherice al hacerme su amiga como si nada hubiera pasado entre nosotros.

Hacia un calor tremendo en la cocina, pero nada lo que no estuviera ya acostumbrado, pues mi madre era chef y cuando hacía de comer la cocina siempre se sumía en un calor similar, así que esto solo me trae buenos recuerdos. Mientras Elioth y yo estábamos sumidos en un calor infernal, me empecé a preguntar si mi hermana se encontraba bien, no suele pasarse tanto tiempo encerrada en el baño, me alcé de hombros restandole importancia. Empecé una sencilla conversación con Elioth para hacer amena la cocina, y quitarme de encima la presión de que algo pudo haberle pasado a Ali, entonces la voz de Cherice atrajo nuestra atención, nos asomamos solo para ver como bajaba echa una furia las escaleras hacia afuera dónde se encontraba Amane, Elioth fue a atender el pavo pero yo me quedé viendo desde mi lugar lo que pasaba, pelea de pareja, suspire y me volví a Elioth que me pidió ir a ver que sucedía. -No le quites el ojo de encima a ese pollo gigante- Bromeé limpiando mis manos para ir a la entrada justo cuando Cherice le gritaba algo a Amane que alertó mis sentidos.

-¿Contarme qué?- Fue lo único que pude articular manteniendo el gesto duro que por años había formado para el ejercito y para proteger a mi hermana. Cherice se mostraba aterrada y no lo dudo, frente a ella jamás he mostrado semejante expresión pero frente a Amane sería la segunda vez que lo hago. Las palabras del infeliz solo funcionaron para hervir mi sangre, quería golpearlo vaya que sí pero antes necesitaba ver a Ali, que estaba en el baño, esa tonta... ¿por qué enfrentar el problema sola? Más grande fue mi sorpresa al verla en la cocina charlando con Elioth con una sonrisa de oreja a oreja en su rostro, solo puedo ver como me guiña un ojo, me lo explicará en otro momento. Sale para ir por Cherice y Amane diciendo que ya quería entregarnos nuestros regalos. Al empezar a repartirlos me sorprendió que a pesar de lo que me había dicho Amane ella parecía imperturbable como si nunca hubiese pasado nada, al darme el mío pude ver que esperaba con gran ansia que lo abriera.

-... es una broma... ¿Verdad?- Al abrir la pequeña caja que dejo en mis manos, solo pude quedarme callado, pues dentro de ella no había otra que que no fueran juguetes sexuales... ese maldito de Conrad, seguro que fue él quién le comentó acerca de mi pareja. Baje la cabeza cerrando la caja con cuidado para que nadie más viera su contenido -Vale, admito la derrota- El vestido que le di yo, a comparación de esto... si, realmente ella me hizo una broma mejor.

El frío aire golpeaba mi rostro de tal forma que sentía calor, solo cuando escuche la voz de Cherice llamarme fui capaz de volver en razón, pero al instante quedé pasmado cuando su  mano se estampo en mi mejilla para luego reclamarme que Alexia me había escuchado, en realidad no me importaba mucho que pudiera estar encerrada en el baño, es más ni me siento preocupado a pesar de que es culpa mía, solo mantenía la vista fija en ella, esperando alguna otra queja de su parte, pero solo me exigió arreglar las cosas o se lo contaría ella a Alexander, el cuál hizo su aparición segundos después. -Nada en realidad, solo decirte que en realidad jamás me interese en tu preciada hermana- Se que me espera un golpe seguro, de parte de él o de Cherice, pero en realidad no siento que me pueda importar, suficiente tengo ya con que Cherice me mire de esa forma. En lugar de lo que esperaba fue directo al interior de la casa, claramente en busca de su hermana, yo suspire, quería quedarme ahí afuera y no ver a nadie, necesito hablar con Cherice. pero antes de lograrlo Alexia salió para decirnos que quería darnos nuestros regalos.

Al recibir una gabardina de parte suya me quede sorprendido, no esperaba algo de parte suya, y menos ahora ¿Firma de paz? No entiendo nada, en realidad que no comprendo -Ahm... ¿Gracias?- ¿Esto quiere decir que ella no tiene nada en contra mió?

Me quede pasmada, realmente no digería la situación no solo por la respuesta de Ranmaru sino por la reaccion de los Kanda, realmente no lo comprendía. Al salir Alexia como si nada hubiese ocurrido me quede realmente boquiabierta, entre para recibir los regalos alejandome lo mas posible de Ranmaru sin mirarlo. Me quede de pie a un costado, alejada de los demas.

Me sentia llena de rabia y decepcion, creo que no sentia tanto enojo desde que una novia de Blake me amenazo para que me mantuviese lejos de el cuando en realidad lo engañaba con otro chico. Mi hermano tardo meses en recomponerse de eso y jamas le hable de la amenaza.

Cuando mi amiga me dio sus regalos solo alcance a hacer una sonrisa forzada mientras evitaba la mirada -gr..- la voz se me quebraba al hablar pero tenia que sacar fuerzas - gracias, es muy lindo- le dije ante el vestido.

Lo deje delicadamente y sali afuera, necesitaba aire. Me fui corriendo de alli, corri como aquella noche, corri por la nieve con toda la velocidad que me permitian mis piernas, como la gacela más rapida del mundo, hasta que el golpe frio dio de lleno en mis pulmones ahogandome. Caí de rodillas a la nieve, comenzando a llorar llorar como si no tuviese consuelo.

De pronto en mis hombros se encontraba un abrigo, como un conejito asustado mire quien me lo habia dado pero al encontrarme en esos mismos ojos esmeralda que los mios solo pude lanzarme a sus brazos -quiero irme de aqui ELioth, solo quiero que nos vayamos hermano, no quiero, no puedo soportarlo mas- hundi mi cabeza en su pecho mientras el me preguntaba por lo ocurrido, se lo conte todo, necesitaba sacarlo de adentro mio como el veneno de una serpiente.

Alce mi vista un instante, automaticamente mis ojos se llenaron de rencor -que es lo que quieres?- le dije con desprecio aquellos ojos grises que amaba por eso me dolia tanto porque me habia enamorado de el.

Me quedé cuidando el pavo pero atento a la situación cuando la voz de Alexia me sobresalto voltee a verla con una sonrisa iba a responderle cuando su hermano entro en la habitación y ella le guiño un ojo, es esa coneccion de hermanos la que envidio y no puedo evitar preguntarme si la tendré con Cherice algún día.

Detrás de Alexander entraron Cherice y Ranmaru, ella estaba seria no era la misma de siempre quise preguntarle que ocurrió cuando Alexia nos llevó al living a darnos nuestros regalos. Definitivamente algo no andaba bien, conosco su sonrisa forzada, conocí mucho de ella en Italia, algo no cuadraba. Miré a Amane cuyo rostro también estaba ido.

Al darme mi regalo el devolví una sonrisa -es excelente -dije abrazándola - gracias preciosa, te daría un beso si pudiese- le susurré al oído manteniendo mi compostura ante su hermano.

Fue cuando la vi salir de la casa a Cherice, aprobechando la distracción de todos comencé a seguirla, camine detrás de ella silenciosamente mirándola cuando empezo a caminar más rápido y luego a correr. Por supuesto corrí detrás de ella no perdería su paso. Si que era rápida pero yo lo era más, pero prefería mantener la distancia. Finalmente algo la hizo detenerse y caer al suelo ¿llorando? me detuve varios metros detrás, acercándome lentamente, me quité mi abrigo posándolo sobre ella para calentarla cuando por sorpresa se lanzó a mis brazos -que ocurre? no te veía tan desconsolada desde que visitamos el cementerio- la abrace con fuerza escuchandola atentamente.

No pude evitar sentir cómo se me hervía la sangre con cada palabra que me contaba cuando al escuchar su pregunta voltee.
Era Amane seguido de los hermanos Kanda, separé dulcemente a Cherice de mi corriéndole un mechón de pelo del rostro, sin dudarlo tan rápido como inesperado voltee y le di una golpiza que lo tiró al suelo - te la debía -le dije mientras me tronaba los dedos -no te quiero cerca de mi hermana - le dije esperando que se ponga de pie para darle otra golpiza.

Sonreí ante el festejo de Alexander por mi acción, en ese momento no me importaba nada, si me veía mal la mujer que amaba, nada, solo proteger a mi hermana.

Cherice salió... Elioth fue detrás de ella... y Ranmaru por alguna razón también lo hizo, me quede asolas con mi hermano, quién de inmediato se acerco a mí, enormes espasmos invadieron mi cuerpo y me doble sintiendo arcadas, las lágrimas habían comenzado a fluir de mi interior sin control alguno. ¡¿Por qué?! Pase años obligándome a no tener emociones, a levantar barreras para protegerme de todos y... ahora con unas tontas palabras como "jamás me importo" derrumban lo que por años construí, esa fortaleza de hacer como que nada jamás paso y seguir con tranquilidad, se hizo pedazos.

Mi cuerpo tiembla, y el abrazo de mi hermano no me está ayudando en nada, entre hipos logre reponerme y me alsé para encarar lo.

-Estoy segura de que lo escuchaste de él... no tiene caso que yo te lo repita-

Sin embargo, una parte de mí reacciona y me doy cuenta de que él no sabe de la barrera que había levantado.

-Yo únicamente... durante los últimos tres años he creado una barrera en mí, me cierro a las emociones, y... ese... ese idiota miertero, la derrumba sin tener consideración de nada Sasha yo... - Alboroto mi fleco- Cuanto me gustaría poder eliminar esa parte de mi cerebro que me hace tener emociones...-

No me dí cuenta de cuando, ni del por que, pero en algún momento estaba siendo jalada por Alexander en la misma dirección por la que habían ido los demás, sabía sus intenciones, quería hacerme enfrentar ese momento y seguir adelante sin crearme defensas, eso es realmente lo que quiere hacer, pongo toda la resistencia que puedo para no ir pero es inútil es más fuerte que yo, cuando me doy cuenta estamos llegando junto cuando Elioth golpea a Ranmaru, un amago de sonrisa se dibuja en mí, supongo que esa es su venganza. Por el golpe que el le dio antes de que se fuera a Italia.

Su mirada me mostraba la furia que sentía, no diré que no la comprendió, por que es la misma expresión que puso mi hermano ese día, quise irme pero él me detuvo, no me va a dejar ir, no lo hará. Suspiro y pongo a la constructora de mi mente a trabajar para que monte la barrera en cuanto los guardias desalojen a los sentimientos. Cierro los ojos y cuando los abro dibujo la mejor de mis sonrisas, me suelto de mi hermano y camino hacía Cherice, me inclino para quedar a su altura y la abrazo, la abrazo tan fuerte que siento que en algún momento le haré daño, pero no la quiero soltar.

-Lo lamento... siento que fue culpa mía que esto pasará, si nunca hubiese entrado a ese elevador no habría pasado esto... en verdad perdóname Cherice...de todas las personas del mundo, tú eres a la que menos quería lastimar-

Susurre cerca de su oído sin acortar la distancia entre las dos, nuevos espasmos me invadieron, solo que está vez yo los había dejado salir, acabo de hacerle algo horrible a mi amiga... no se si podré salir de está...

Rol off: a quien le toca? Alexander o ranmaru?

No podía soportarlo, ver a mi hermana llorando, me acerque a ella y la rodeé con mis brazos dándole toda la fuerza que necesitaba que dejara de llorar, no me gusta verla de esa forma. Besé su cabello y me deje caer en el suelo abrazándola, se alejo de mí un poco y dijo que no tenía caso que me lo dijera, yo ya lo había escuchado.

Ya sabía que ese infeliz solo la había utilizado, sin embargo no sabía por que se había puesto de esa forma, nunca la había visto reaccionar de manera semejante, quite de su rostro los mechones que caían sobre su rostro y escuche atentamente sus palabras.

-Ali, se que te lastimo mucho lo que paso, pero no puedes dejar que te derrumbe de está forma. Tienes que afrontar la situación- Tome su mano y la lleve conmigo, habían ido por este camino, y si no, es el único lugar por el que pudieron haberse ido. Siento los constantes jalones que da mi hermana para no querer ir, algo inútil. No importa cuanto intente, no la dejare ir.

Nuevamente hizo intentos por irse, fijo los ojos en Elitoh,  vaya que ese fue un buen gancho. No lo oculte solo sonreí. Me acerque a Elioth y deje caer mi mano en su hombro, las cosas iban a cambiar bastante luego de este día.

Di una última calada al cigarrillo en mi mano. No soy muy dado a fumar, sin embargo necesito uno en este momento. La nieve cubre mis pies, y parte de mis hombros. Mire al suelo y saque el humo de mis pulmones.

La había fastidiado, lo había hecho y con ganas, ¿Qué diablos paso por mi cabeza? Fui honesto con mi novia, le conté parte de mi vida tal como había hecho ella, y sin embargo... ¿Por qué todo salio así? Eleve la vista y pude notar que había un par de niños frente a mí, baje el rostro y prendí un nuevo cigarrillo.

¿Estará ella con su hermano? ¿Con Alexia? O posiblemente ¿Con Alexander? No lo sé. No quiero saber, quiero deshacer lo que hice, me hubiera dado igual si solo fuera Alexia quién se molesto conmigo, o su hermano... pero fue Cherice. La única persona por la que realmente me he preocupado. Sentí una mano sobre mi rodilla, y vi a la pequeña niña frente a mí, me recordó al día en que conocí a Cherice, ese día que terminamos atrapados por la lluvia.

Si tan solo... fuera tan fácil enmendar los errores. Apague el cigarro en la nieve y me levante, lo arroje a la basura y empece a caminar a donde supongo yo, fue Cherice. No me equivoque, estaba dónde yo creía, sin embargo al llegar solo recibí un golpe de de Elioth. Lleve mi mano mi boca y limpie el hilo de sangre que caía de mi labio.

Suspire y trate de controlarme y no regresar el golpe, ya había hecho bastante daño el día de hoy.

Me quedé mirando a Ranmaru tirado en la nieve por un lado me inspiraba dolor por otro me parecía patética la situación -¿por que no te levantas?- le dije fría y cruelmente. Estaba cansada de sufrir. Recuerdo que cuando era pequeña y mi hermano había sufrido el desamor mi madre a pesar de su odio me dijo "el mundo está rodeado de gente egoísta que piensa más en sí misma que en los demás, ya no hay amor" creo que nunca recordó que yo estaba a su lado y se que ella intentó verme con cariño pero simplemente no surgió de ella.
Hoy creo que sus palabras son reales crucé una última mirada con Ranmaru con Elioth por delante mio. Sólo vi en sus ojos una inmensa tristeza que no pudo expresar con palabras. Se levantó lentamente cuando mi hermano atinaba a pegarle nuevamente pero lo detuve poniendo mi mano en su hombro
-déjalo, vamos a casa- le dije y nos pusimos en marcha hacia la camioneta ni quise agarrar mis cosas.
Pase por al lado de mi amiga pero no me atreví a mirarla porque lloraría.

Al pasar por al lado de Ranmaru el quiso tomar mi mano y detenerme pero Alexander no se lo permitió y aproveche ese momento para continuar mi camino.
Subí al auto Elioth me preguntó si estaba bien, pero no fui capaz de responder sólo puse música mientras empezaba a nevar y Elioth conducía la camioneta prestada por Alexander.
Al cabo de un rato de viaje sólo pude decir -creo que deberíamos mudarnos, irnos a vivir juntos, como hermanos pero lejos de aquí - dije al aire mientras miraba por la ventana.
Era una idea pero la mejor que en ese momento podía tener.