Tranquilidad [publico]

Camine tranquila hacia el gran árbol que se encontraba en el patio. Estaba aburrida, y sin nada que hacer.
Me acosté debajo y puse mis manos bajo mi cabeza. Sentí una suave brisa pasar por mi cara, y los pequeños rayos de sol que pasaban entre las hojas se sentían cálidos al contacto con mi piel.
no había nadie cerca, el lugar se sentía pacifico y silencioso. Perfecto para poder relajarse un rato. En mi caso, ese lugar era perfecto para poder dormirme.
Cerré de a poco los ojos, sin apartar la vista de las hojas del árbol, y escuchaba el alegre canto de las aves.
Recordé a las chicas que había conocido, y también al guardián. Esas personas me resultaban extrañas, sin embargo me parece interesante que me hayan hablado. En especial las chicas, me preguntaron si podía ser su amiga. Tal vez no fue mala idea que entrara a este colegio.
Largo un suspiro pequeño al recordar también el problema que hubo todo el día, no podían recordar nada. Me gusta esta escuela, pero es imposible negar que es extraño que tantas alumnas no recuerden nada. Eso es algo que me inquieta bastante.
Finalmente después de haber pensado todo eso, me siento inquieta, no me paro, pero termino de abrir por completo mis ojos.

Nuevamente estoy aquí, hace pocos días comencé el instituto y no me hablo con nadie, no es como si realmente me importara, pero el sentimiento de soledad que me invade se apodera cada vez más de mi y es totalmente desagradable el ser un ser solitario todos los malditos días de tu vida.
Salí de mi salón, el aula B, que era para los estudiantes de 17 años. Al parecer allí ya se están empezando a formar grupos, pero yo me alejo de ellos, siempre que me digo a mi mismo Es hora de hacer amigos, Zero un sentimiento oprime mi pecho, como si algo que paso antes de llegar aquí influyera mucho.
Comencé a caminar por el instituto, realmente no lo conocía, ya que desde que llegue eh visto muy poco y no me llama la atención el recorrerlo por completo, quien sabe con que cosas me puedo encontrar, aunque creo que seria divertido desde cierto punto.
Divise muchas cosas en mi calmada caminata, pero no les preste mucha atención realmente, ya que llevo puestos mis auriculares y es como si lo que estuviera a mi alrededor no importara en lo absoluto, un efecto sedante que produce la música alta en mi.
De la nada, llego a un lugar lleno de arboles muy hermosos, supongo que es el patio, aunque no lo se, ya que esta realmente vació y silencioso El lugar perfecto para dormir pensé con una sonrisa de medio lado.
A paso relajado, camine viendo cada detalle del lugar, lleno de pasto al natural, arboles grandes y hermoso, con una brisa que los mecía haciéndolos danzar a su ritmo, realmente quede encantado al ver las hojas caer de ellos.
Seguí mi recorrido hasta que de la nada detuve mis pasos, en un gran árbol vi a una chica, no la pude divisar muy bien, así que por mera curiosidad fui acercándome sin hacer ningún tipo de ruido, imitando el andar de un felino.
Una vez que llegue a unos pasos de ella, apague la música y me di el lujo de observarla tranquilamente.
Tiene el cabello rojo y lacio, le llega hasta la cintura, no se ve muy alta, de un tono de piel acaramelada, pero a la vez clara, era delgada y a su rostro estaba apacible, pero con el ceño ligeramente fruncido, como si estuviera pensando algo detenidamente.
No se que sucedió, quizás noto mi presencia o solamente decidió hacerlo, pero de un momento a otro abrió sus ojos dejándome ver el color amarillo oscuro que poseían.
No le dije nada, solamente me quede mirándola y el lugar se sumió en un incomodo silencio...

Todo el lugar estaba en calma. Solo se oían las aves, pero pude notar el ruido de unos pasos. Era un ruido muy pequeño, puede ser que alguien se me este acercando.
Finalmente deje de oír los pequeños pasos, y sentí la presencia de una persona cerca mio. Sentía que me observaba, la sola idea de pensarlo me hizo fruncir un poco el ceño.
Por fin abrí los ojos para confirmar mis sospechas. Mis ojos se encontraron con otros, de color amatista claro. Aparte la vista de los ojos y mire bien, frente mio tenia un chico, que nunca había visto, su cabello era plateado, un color extraño, parecía alto, era flaco, y tenia una cara seria, pero se podía notar curiosidad en ella.
El era la persona que yo había escuchado llegar. Solté un pequeño suspiro, me senté en el pasto y me relaje. Al menos no estoy loca y no escucho cosas. Pase mi mano por mi pelo para sacar unas hojas y volví a dirigir mi mirada a ese chico.

La seguí mirando con seriedad intentando ocultar mi curiosidad.
Nuestros ojos se encontraron por un momento, pero solo fueron segundos, ya que aparto su mirada y sentí como con ella me analizaba. Seguramente extrañada, después de todo, ¿dónde demonios encuentras a alguien de ojos amatistas claros y pelo plateado? ah si ya lo recordé, en muy pocos y reducidos lugares de todo el mundo.
Vi que luego de mirarme suspiro, paso su mano por su cabello quitándose algunas hojas que le habían caído y me volvió a mirar.
En ese momento me sentí estúpido, después de todo, fui yo el que la interrumpió, así que decidí hablar de una vez.
Abrí mi boca, pero antes de que alguna palabra saliera, un molesto dolor en el pecho me invadió, se que hice una mueca de molestia.
Para que lo haces, después de todo no saldrá bien fruncí es ceño y chasquee la lengua molesto ante las palabras de mi subconsciente, pero decidí ignorarlas y por fin hable, aunque lo hice con voz seria y un tanto fría:
-Hola-

Hizo una mueca, ¿Le dolía algo? Vi que se recompuso rápido, habrá sido algo momentáneo.
Frunció el ceño y por fin hablo -Hola- Dijo con una voz fría. Parece que no tuviera muchas ganas de entablar conversación, que no es algo que a mi me interese.
Volví a mirar su cabello, me llamaba la atención, y también sus ojos. Volví a soltar un suspiro, yo no puedo decir nada de pelo, el mio siempre a sido objeto de burlas ¿Que clase de persona tiene el pelo rojo profundo natural?
Finalmente abrí mi boca.
-Hola...-
Fue lo único que le dije. Últimamente e hablado con mas gente que lo que suelo hacer, sin embargo no se muy bien como entablar una buena charla, sin mencionar que soy muy mala con respecto a tratar con los hombres.

Vi que volvió a mirar mi pelo y mis ojos, no la juzgo de todos modos siempre solían decirme cosas por él, aunque, no es como si les prestara demasiada atención a esos idiotas que lo hacían, solo eran pequeños mocosos intentando hacerse los grandes, solo eran puros engreídos, pero volviendo al tema principal de todo esto. Vi que volvió a suspirar y de un momento a otro me contesto
-Hola...-fue lo único que dijo.
Nuevamente se produjo un momentáneo silencio y volví a escuchar a mi grandioso subconsciente opinando hermosamente Perfecto Kiryuu, si que sabes como comenzar una conversación, pero como antes, solo me dedique a ignorarla.
La mire detenidamente, como suelo hacerlo con todas las personas, soy muy analítico y algo tímido aunque no lo demuestre y me di cuenta de que no es una mala chica y persona, pero al parecer no se siente cómoda con mi presencia.
No pude evitar que mi mirada mostrara un pequeño toque de tristeza y soledad por un momento, algo que rápidamente hice que fuera rebeldía para que no se notara que es lo que realmente siento.
-Oye...si realmente te moleste, te pido disculpas no quise incomodarte- dije en un tono seco y hasta casi pareció molesto, algo por lo que me reprendo mentalmente, no era apropósito, pero ya estaba incorporado en mi, espero que no se lo tome a mal y crea que soy uno de esos amargados de la vida que todo les molesta...

Volvió a parecer el profundo silencio. Sentí como el me mira, con ojos serios. Sentí tristeza en sus ojos por un momento y por fin volvió a hablar -Oye...si realmente te moleste, te pido disculpas no quise incomodarte- Dijo directo y cortante. Parecía como yo suelo responder. Al pensar que se parecía un poco a mi no pude evitar que se me escapara una pequeña risa.
- No molestas-
Dije volviendo a poner mis rostro serio.
-...no incomodas-
Supongo que malinterpreto mi cara. No es la primera vez. Siempre pasa, Bunchy me había dicho que sonriera mas. Lo mire a el detenidamente. Me pregunto si tendría que sonreír le.

Luego de hablar lo más cordialmente posible, notese el sarcasmo, ella me miro y soltó una pequeña carcajada para luego decir...
-No molestas-
Luego de aquello, su rostro se volvió serio de inmediato y dijo.
-...No incomodas-
Genial, acabo da darme cuenta que no soy único en el mundo, al parecer esta chica...de nombre desconocido, tiene una personalidad igual a la mía, aunque estoy seguro que los motivos y razones por la cual la adquirimos fueron muy diferentes...
Espera me dije a mi mismo No seria bueno preguntarle el nombre o algo, digo, si quieren iniciar una conversación... por fin una idea buena de mis subconsciente.
-¿Cómo te llamas?-
Sí, lo se, no soy el tipo más amable del mundo, pero decidí volver a empezar y si esto implica un cero como inicio, supongo que...debo tratar algo mejor a las personas, claro esta sin cambiar mi personalidad pensé mientras la miraba...

Hablo el de nuevo -¿Cómo te llamas?- Me pregunto rápidamente. Desvié mi vista de nuevo hacia las hojas del árbol.
-Yume Kurokawa-
Dije mi nombre casi en un suspiro. Cerré los ojos unos segundos. Cuando los abrí mi vista se dirijo hacia un pequeño animal que se poso en mi mano, una pequeña ave. No la es primera vez. La acaricie un poco. Creía que el chico se iría al hacer algo tan raro. Gire la vista de nuevo, y aun seguí allí. No lo había notado, pero, desde aquí su pelo brillaba un poco con el sol.
-¿y tu....como te llamas?-
Le dije mi nombre, pero me concentre tanto en la ave que no le había preguntado el suyo. Pero no parecía molesto.

Luego de preguntarle el nombre, vi como desvió la mirada, a otro árbol supongo.
-Yume Kurokawa-
Me respondió en un suspiro, cerró los ojos por unos segundos y vi como una pequeña ave se posaba en su mano y al sentirla abrió los ojos para luego acariciarla. Quizás esa ave este familiarizada con su presencia, entonces recordé a Lily y del como dejaba que únicamente yo la tocara. Por lo que su gesto con ese pequeño animal no me pareció raro, después de todo, los animales son los únicos verdaderos amigos que se pueden llegar a tenes, o bueno, por lo menos hasta ahora venia pensando, quizás me equivoque un poco.
Veo como vuelve a mirarme como si hubiera esperado que me fuera y de la nada dijo
-¿y tu....como te llamas?-
Por fin lo pregunto expuso mi mente y yo solo rodé los ojos.
-Zero Kiryuu-
Le respondí serio, pero a la vez sereno, el ambiente era ameno, algo que sin duda me transmitía tranquilidad.
-¿Cuántos años tienes?-
Pregunte un tanto interesado...después de todo, se veían un tanto madura.

Escuche que me respondió -Zero Kiryuu- Zero? Nunca había escuchado un nombre así.
Luego escuche otra pregunta -¿Cuántos años tienes?- Me pregunto con una voz serena y tranquila. Antes de responder, me pare y acerque a una rama gruesa del árbol el pequeño pájaro que tenia en mi mano. El se subió a ella, y yo me di vuelta para ver a Zero.
-16...-
Respondí y junte el pelo que me molestaba en la cara detrás de mi oreja. Esa pregunta es muy normal, casi todo me la haces y suelen pensar que tengo mas años.
- ¿Y tu?-
Le pregunte con un tono tranquilo y un tanto curioso. Parecía grande pero no demasiado, supongo que tenia mas o menos mi misma edad.

Vi que después de mi pregunta se paro y poso al pequeño animal en una gruesa rama de un árbol al cual subió tranquilo.
-16...- me respondió finalmente y luego de eso, se paso el cabello que tenia en la cara detrás de la oreja, seguramente le es algo molesto o incomodo - ¿Y tu?- volvió la pregunta en un tono tranquilo y hasta pude detectar curiosidad, después de todo, no debo parecer muy grande.
-17- le respondo tranquilo y en ese momento, una pequeña briza paso, yo solo cerré los ojos disfrutandola complacido y después paso una manos por mis cabellos, alborotandolos un poco, ya que prefiero el estilo rebelde.
-Este lugar...es realmente tranquilo-
dije en un susurro
-¿Por qué no vine antes?-
Pensé en voz alta para luego suspirar y volver a mirar a a Yume.
Yume eh, en mi país natal ese nombre significaba sueños...tiene...
-Tiene un nombre bastante bonito-
Y ante esto abrí un poco los ojos, se me escapo el pensamiento en voz alta...

Me respondió a la pregunta rápidamente -17- Solo es un año mayor que yo, entonces es mi sempai.
Sentí la suave brisa, se sentía tan agradable. Lo escuche hablar de nuevo -Este lugar...es realmente tranquilo- Dijo tan bajo que apenas lo oí y luego pregunto -¿Por qué no vine antes?- Supongo que se estará hablando a si mismo, yo lo e hecho antes, así que no me sorprende mucho.
Me empece a relajar de nuevo hasta que lo oí decir -Tiene un nombre bastante bonito- Lo vi un poco sorprendida ¿Lo dijo por mi nombre? No puede ser, debió haber recordado a otra persona. Pero de todas formas mis mejillas se pusieron algo rojas.

La vi sorprendida luego de lo que dije y a la vez vi como sus mejillas se ponían algo rojas.
Lo que había dicho lo dije sin querer, se me escapo la lengua, vulgarmente hablando.
-Ejem...-
Carraspee intentando cambiar de tema...
-Si mal no supongo, estas en el salón A ¿no es cierto?-
Espero que con esto, se olvide de lo que dije, realmente estaba un tanto nervioso, yo y mi gran boca...

Me tranquilice y el dijo -Si mal no supongo, estas en el salón A ¿no es cierto?- Creo que mi reacción lo puso nervioso.
-..Si-
Respondí bajando la vista al piso. Hice que se pusiera nervioso, y ahora yo lo estoy. Respiro profundo y trato de relajarme. Finalmente lo hago, pero no subo la vista.
- ¿Tu estas en el B?-
Trato de pensar en otra cosa para no volver a lo de antes. Siento el ambiente un poco tenso ahora.
Suspiro al pensar que tal vez debía haber ignorado aquel comentario. Pero si era por mi nombre, era la primera vez que alguien decía algo así.

-...Si-
Me respondió bajando la vista al piso, parece nerviosa.
Respira profundo y al parecer intenta relajarse, pero no sube la mirada.
Genial Zero, hiciste que el ambiente se pusiera tenso me reprendí mentalmente y si hubiera podido golpearme lo haría, pero, tengo una imagen de persona seria que mantener.
-Así es...-
Le respondí calmado e intentando que el ambiente se tranquilizara y volviera a ser sereno nuevamente.
-...-
No sabia que decirle...ya que no soy un genio en este tipo de cosas. Suspire algo exasperado, pero nuevamente me relaje e hice algo que nunca hago con desconocidos...
-Oye Yume...te gustaría hacerme compañía, hace días que estoy aquí, pero eres la primera persona con la que me hablo...-
Sonreí amablemente y espero que ella me mire a ver que sucede...

Me respondió a mi pregunta. Parece que trata de calmar el ambiente. El también noto de que estaba bastante tenso.
Lo oí suspirar y luego hablo -Oye Yume...te gustaría hacerme compañía, hace días que estoy aquí, pero eres la primera persona con la que me hablo...- Me sorprendí por lo que me dijo. Levante la vista y lo mire. El estaba sonriéndome. Por la falta de costumbre de que un chico me sonriera así me sorprendí mas y me termine sonrojando de nuevo.
-..yo..-
Estaba nerviosa y titubeaba al hablar. Finalmente volví a respirar profundo y mi cara volvió a la normalidad cuando me relaje.
-..Esta bien-
Le respondí mirándolo fijo. Supongo que no hay ningún problema, de todas formas yo tengo nada que hacer.

La vi levantar la vista ante mi propuesta...y de inmediato al verme se mostró sorprendida y se volvió a sonrojar...creo que me volví a pasar.
-..yo..-
Estaba nerviosa y titubeaba al hablar, si oficialmente me excedí...aunque, luego de eso, respiró profundo y su cara regreso a esa seriedad normal con la que la vi hace unos momentos.
-..Esta bien-
Me respondió al final mirándome fijamente y ante esto, cambie mi sonrisa por una de medio lado y la mire con cierta gracia en los ojos.
Bipolar Zero, pareces bipolar solté una pequeña carcajada sin negar lo que mi mente me exponía.
Depués de aquello, le di una significativa mirada, para luego mirar a los alrededores y encontrar mi objetivo.
Di unos pasos hacia adelante, tantos como para darle la espalda. Me detuve un momento y dije...
-Sígueme-
Para luego seguir mi marcha, estando atento a si se movía o no...

Soltó una pequeña visita ¿Mi cara le dio gracia, o fue mi reacción tal vez? El dio unos pasos y se dio la vuelta. Yo me quede quieta en el lugar, hasta que finalmente lo oí decir -Sígueme- Y volvió a caminar. Me quede quieta unos segundos, hasta que por fin, reacciones, y empezar a dar pequeños pasos tras el. Esta desconfiada, estaba acompañado a alguien que recién conocía, pero no tenia miedo. Se defenderme, así que no creo que algo me pueda pasar. Ademas este chico me genera confianza, tal vez por que se parece solo un pico a mi.
-hm...-
Largue un pequeño suspiro y luego una risa muy pequeña al pensar eso. Y me centre en mirar la espalda de el chico mientras caminaba tras el.

Luego de unos segundo escuche pasos ademas de los míos y sonreí de medio lado nuevamente.
Chica interesante pensé tranquilo...
-hm...-
Largo un suspiro y luego una pequeña risa, quizás esta pensando igual que yo.
Negué con la cabeza divertido y seguí mi caminata entre el tranquilo lugar. Los arbolen danzaban y las hojas caían a nuestro alrededor.
Es hermoso pensé mientras me quedaba quieto admirando el gran árbol de gruesas y grandes ramas que mas parecían, troncos diminutos que otra cosa.
-Es aquí- le informe sin mirar atrás y de un momento a otro, con toda la adrenalina a flor de piel, di pasos acelerados y emocionados caminando hacia el árbol y de un salto me subí a una rama que sobresalía y por fin luego de estar parado de manera estable, me voltee y mire a Cassandra esperando a ver que hacia...

Caminamos un rato hasta que por fin el se detuvo y hablo -Es aquí- Y corrió feliz hacia un gran árbol. Me quede ahí quieta mirando, admiraba aquel enorme árbol.
-Increíble-
Tenia los ojos abierto de la sorpresa. Y luego note que el chico se encontraba en el árbol, parado sobre una gruesa rama y me observaba. No estoy segura de como se actúa en estas situaciones. A si que solo me acerque al árbol despacio y apoye mi mano en el tronco. Era áspero y frió, sin embargo parecía resistentes, ya tendría varios años seguramente. Solté una pequeña sonrisa, y me colgué de una rama de un salto. Con la fuerza de mis brazos me impulse hacia arriba y me pare sobre la gruesa rama. De pequeña me gustaba trepar los arboles, supongo que por eso se me hace feliz hacerlo ahora, y me costaba tan poco. Aun parada en la rama, me apoye en el tronco y mire a Zero tranquila.

Un a vez trepe el hermoso árbol voltee a mirar a Yume y la vi realmente ¿maravillada?
-Increíble-
Dijo mientras miraba con los ojos abierto el árbol.
Me miro y luego de hacerlo, se acerco despacio al árbol y poso su mano sobre el, si es áspero y frío, realmente reconfortante.
De la nada soltó una pequeña risa, lo cual me hizo recordar a una niña pequeña que realmente estaba feliz, y seguido a eso, se trepo a una rama de un salto, lo cual me hizo suponer que ya estaba acostumbrada a trepar árboles, aunque realmente no me sorprendió, después de todo, nos parecemos, bueno no en todo, pero hasta ahora tenemos varias cosas en común.
Una vez se estabilizo en la rama, me miro y yo solo le regresé la mirada relajado y como si fuera cosa de todos los días, lentamente me fui acostando en la rama y mire como se veía el +árbol desde este panorama.
Mire cada rama, y como de ella salían hojas, como la luz se colaba entre ellas y como la brisa movía todo, algo realmente maravilloso y hermoso.
-Amo este tipo de lugares...de pequeño solía hacer lo mismo que en este momento. Trepar arboles y dormir en sus ramas hasta cansarme-
Solté muy relajado y disfrutando el ambiente tranquilizador y lleno de paz.

Me quede allí parada y vi como el se iba acostando en la rama. Por fin el rompió el silencio -Amo este tipo de lugares...de pequeño solía hacer lo mismo que en este momento. Trepar arboles y dormir en sus ramas hasta cansarme- Dijo completamente relajado.
-Yo....era igual de pequeña. Con mi familia solíamos ir a acampar seguido y yo me adentraba en el bosque-
Mire hacia arriba y disfrute del paisaje de las hojas. Al recordar esos momento solté un sonrisa un poco triste. Cerré mis ojos y inspire profundo para sentir el olor a las hojas y la madera.
Siento que algo camina por mi cabeza. Cuando abro los ojos y subo mi mano, una pequeña ardilla se sube a ella. Yo simplemente la acaricio con mucho cuidado y le sonrió un poco.

Una vez que le conté mi pequeño secreto, escuche su respuesta.
-Yo....era igual de pequeña. Con mi familia solíamos ir a acampar seguido y yo me adentraba en el bosque-
Realmente estaba concentrado en el paisaje, y como estaba acostado no podía verla ni tampoco sabia las acciones que podría estar haciendo. Lo único que logre escuchar fue una sonrisa un tanto triste, seguida de una respiración bastante profunda.
Debe haber recordado algo malo supuse entendiéndola.
Mi pasado no era algo feliz que digamos, por lo que lograba entenderla completamente.
-Oye Yume...¿te gustan los animales no es cierto?-
Pregunte de la nada con un tono sereno intentando entablar una conversación para poder conocerla mejor, después de todo, me resulto interesante.

Levante mi mano hacia la rama de arriba donde la ardilla su vio. Y yo la vi corriendo entre las ramas tranquilamente. Hasta que oí que Zero me hablaba de nuevo -Oye Yume...¿te gustan los animales no es cierto?- Dijo tranquilo. Yo me quede callada unos segundos y luego vi hacia adelante.
-Si... ellos nunca te juzgan, tampoco creerán lo que piensen la mayoría. Si un animal es tu amigo....sabes que es un sincero-
Dije con tranquilidad. De a poco mis piernas se fueron doblando, hasta que termine sentada en la rama.
- ...¿Y a ti?
Supongo que no esta mal preguntarle lo mismo. De esta forma, supongo que dejara d ser un extraño.