Momentos de tranquilidad [Público]

Cuando Ranmaru me pregunto cómo me sentía alcé mi vista, veía un poco borroso y tuve que poner mi mano sobre mis ojos para evitar la luz. Ranm puso su mano en mi frente lo cual hizo que me sonrojase un poco.

Asentí con mi cabeza-t-tengo sed- dije en casi un susurro-y...y hambre- no me sentía muy bien.
Alex me dió una botella con agua la cual bebí toda con desesperación como si hubiese estado días en el desierto.

-gra-gracias- le dije a Alexia un poco avergonzada -por todo- la ropa no era un detalle menor.

Ranmaru me dió algo para comer y ambos exigieron saber cómo me encontraba. Miré la comida un poco extrañada- ahm disculpa si soy grosera pero.. ¿qué es esto?- Alexia, entre risas, me dijo que era algo con un nombre que jamás había escuchado.
Tenía tanta hambre que no me importó y comencé a comerlo, era realmente delicioso.

Luego Alexia mencionó algo de que debía ir a darle de comer a Alex y que regresaría. La noté algo incómoda.
-Alex- dije antes de que ella saliera de la habitación, ella volteó a verme-perdoname- no pude verla cuando lo dije, pero eran disculpas reales. Me comporté como una niña con ella -tu realmente eres mi amiga- esto último sí se lo dije mirándola a los ojos.
Ella sonrió y salió de la habitación.

Me quedé sola con Ranmaru quien se sentó delante mio como buscando las palabras para decirme pero yo fuí más rápida y hablé primero- Ranmaru, quiero preguntarte algo y que seas realmente honesto conmigo- tomé sus manos y lo miré fijamente a los ojos, aunque aún me sentía un poco débil- tu y ...tu-tu y Alexia fueron novios? sólo quiero saber qué tipo de relación tienen- se que estaba roja, lo sé pero si no despejaba esa duda de mi mente, me mataría.

Me alegró el saber que estaba bien, y que tenía algo de sed y hambre, fui a la cocina dónde había unas cuantas botellas de agua y al dársela no duro más de tres segundos en su boca, pues la había tomado toda completamente, mientras que Ranmaru le había acercado un poco de kakuski. 

Cuando la escuche dar las gracias me sentí sumamente feliz, era la primera vez en muchos, MUCHOS años que una amiga mía me decía gracias, luego pregunto que era lo que iba a comer, respondí diciendo que era kakuski, entre risas le aclare, que era un platillo ruso. El verla comer algo de mi media nacionalidad me hizo sonreír, y fue cuando me empecé a sentir extraña.

-Yo... ya vuelvo pronto será la hora de comer de Alex y... no quiero tener que comprar otro refrigerador-

Fui a la puerta pero no gire la perilla pues Cherice llamo mi atención, pidiéndome disculpas aunque no me miro se que lo hace de verdad, y luego enfatizo que realmente me considera su amiga, dicen que los verdaderos amigos se cuentan con los dedos, ahora creo que finalmente puedo alzar uno.

Subí las escaleras hasta llegar a mi pieza, en la cuál caí rendida apenas cruce la puerta mi espalda estaba recargada en la misma y sin embargo me dolía la espalda, mi amigo se acercó lamiendo mi mano pues no reaccionaba.Alcé la vista y fue cuando note que todo estaba borroso, ¿Por qué? Cherice es mi amiga no me va a dejar como los demás... entonces ¿Por qué estoy llorando?

-Es irónico sabes Alex... vine aquí queriendo escapar de aquello que me hace débil... de lo que me hace vulnerable...y esa misma razón, vino conmigo-

Acaricie su cabeza riendo ante lo que recién note, y sentí vergüenza de mi misma, desde el momento en el que me destrozaron me aleje de las personas... y ahora buscaba nuevamente su aceptación.

Al verla en buen estado me sentí realmente feliz, pues no le había sucedido nada malo en cuanto menciono lo de tener ser y hambre ambos fuimos por uno de los dos, yo le serví en un plato un poco de kakuski.

Luego de un momento pregunto que iba a comer y Alexia le respondió entre risas, me senté a un lado de Cherice-san en lo que ella terminaba de comer, paso un rato sumamente tranquilo hasta que Alexia mencino debía subir para alimentar a su tigre o de lo contrario compraría otro refrigerador.

No me gire a verla pues un recuerdo cruzó mi mente y por el momento quiero dejarla libre de aquellos pensamientos, salió del apartamento y fue cuando toda la atención de Cherice-san fue únicamente para mí. ¿Alexia y tu fueron novios? Esa simple pregunta se robó todo el aliento que pude haber tenido en algún momento, estaba mudo, ciertamente lo fuimos... aunque hace bastante tiempo ya, mil y un memorias más atacaron mi mente sujete mi cabeza ante el repentino dolor que se presento -Te...te lo menciono ella ¿Cierto...?-

Desvíe el rostro supongo yo de prontó me encontraba pálido, pues no tengo ni la más miníma idea de como podría tratar algo así, usualmente yo no hablo de mi vida amorosa con los demás, pero Cherice-san es la excepción, me arme un poco de valor para poder abordar ese tema que durante años había evitado.

-Sí lo fuimos. Durante tres años...la... la relación que llevamos a-ahora... ah... ni yo mismo se cuál es...- Recargue mis codos en mis rodillas buscando un poco de aire, pues de pronto sentí como si no tuviera nada en mis pulmones aquella fue una época que me dejo bastantes recuerdos buenos y malos -Ah...no... no es un tema de conversación del cuál me sea cómodo tratar-

Rasqué mi nuca nervioso, pues hablar de mi ex-novia con una chica a la cuál apreció demasiado es... bastante extraño, tanto que temó mi platica pueda arruinar en alguna forma mi relación con ella.

mire con atencion a Ranmaru pero al escuchar la respuesta que en el fondo ya conocia  se me vino el alma a los pies. Por que? por que sentia que de todas las personas en el mundo debia ser ella?

Lo mire unos instantes -ella no me dijo nada, de hecho ni sabia que se conocian, simplemente lo note por todas sus acciones- fue cuando mi cabeza estaba hecha un desastre. Comence a recordar lo que Alexia me habia comentado sobre.. su ex novio! mire con mis ojos abiertos a Ranmaru y todo cerro.

Era el, fue el quien desperto a Alix? no, no eso no podia ser no el! Cuando menciono que no era un tema comodo para hablar conmigo lleve mis manos a mi cabeza la cual comenzo a dar vueltas -yo..yo lo siento debo irme- me levante deprisa de su lado debia hablar con Alexia si el fue de quien ella me hablo realmente sentiria el mundo a mis pies.

Me disponia a irme cuando Ranmaru sujeto mi muñeca deteniendome, dijo algo en voz baja, como me dolia ese momento. Si bien yo estaba de espaldas a el pude notar que se puso de pie. No me abraces, no lo hagas, me-me romperas el corazon -por favor no lo hagas- fue todo lo que alcance decir al son de una lagrima.

Cuando solto mi muñeca sali del apartamento en busca de Alexia. Tome el ascensor hasta llegar a su piso, viven en el mismo edificio. Por que? por que me pasaba a mi esto! -hermano quisiera que estuvieses aqui-.

Llame a la puerta y ella me abrio -lo se todo- no se cual debio haber sido mi rostro, pero note sorpresa en el suyo.

Paso un corto tiempo en lo que  enfriaba mi mente de lo que estaba sucediendo, me levante tomando dirección a mi habitación y me senté en la batería que se hallaba al centro de esta, suavemente comencé a tocar pues quería desahogarme del estrés que me empezaba a invadir.

No paso mucho hasta que escuché la puerta Alex al instante había ido a rascarla, fui a ella encontrándome a Cherice un tanto...extraña, no tenía su habitual sonrisa, pero tampoco se veía triste, era como si estuviera tristemente sorprendida. ¿Qué sabía todo? Espera... Ranmaru debió haberle contado, suspire sujetando mi cabeza. invitándola a pasar con un movimiento de cabeza.

-Joder esto es incomodo, ah... entonces te dijo la verdad-

No tengo la más mínima idea de como abordar este tema con mi amiga, quien obviamente siente algo por Ranmaru, pase mi mano por mi nuca pensando lo que podría decirle.

-Adivino, no quieres creer que fue Ranmaru el que despertó a Alix... ¿Me equivoco?-

¿Qué estoy haciendo? ¿Por qué las palabras salen solas de mí boca? No quiero tratar este tema, y sin embargo estoy reaccionando por mero impulso.

Siento repentinamente como si nuevamente estuviera solo, sujete mi frente no me gusta hablar de eso, no quiero hablar de eso y sobre todo no quiero hablar de ese tema con Cherice-san, de entre todas las personas es la única con la que no quiero tratar el tema de mi ex-novia.

Suspire sin lograr creerme que Alexia no le había mencionado, aunque sea sin decir nombres, seguramente ella menciono a su ex-novio en algún momento, y lo más seguro que lo odiaba por ser el detonante que desperto a su doble personalidad, era lo único que me faltaba, que ella supiera que por mi culpa Alexia tenía una doble personalidad.

Sentí que la presión extra del sofá se esfumaba, eso solo quería decir que Cherice-san iba a irse, posiblemente a hablar con Alexia sentí una tristeza que jamás había sentido nunca, nisiquiera cuando mis padres constantemente se quejaban de mi existencia era esa sensación de estar por perder algo que quiero -No...no te vayas tu también... por favor-

Siempre sucede lo mismo, por una u otra razón siempre termino solo, sujete su muñeca con cierta fuerza no quiero que se valla, aún si sigue en el mismo lugar... no quiero que se vaya, jale levemente su brazo con la intención de atraerla hacia mí evitando que se fuera, sin embargo sus palabras taladraron mi cabeza obligandome a soltar su mano por automatico. Había subido ya, no estaba más en el mismo lugar que yo.

-Solo existe una cosa más triste que la soledad, y es querer estar solo... Nunca termine de comprender tus palabras querida madre... ni siquiera cuando he estado solo tanto tiempo-

Caí rendido en el sofá una vez más, ¿Por qué tuvo que suceder así? Si tan solo en ese momento no hubiera hecho lo que hice, posiblemente este futuro sería diferente.

Claramente, el mundo se me vino a los pies.

Entre al apartamento de Alexia y me dejé caer estupefacta en el sillon ¿acaso era eso lo que Ranmaru no quería o no podía recordar?. Suspiré
-sólo me dijo que fueron novios, no me pudo decir más. No me niego a creerlo, simplemente es difícil de aceptar. No se si odiarlo o no- me lleve las manos a mi pecho no sabía qué sentir. Sólo...-sólo se que.. que debería alejarme- escucharme decir eso me partía el corazon al medio.

Mire a Alexia conteniendo las ganas de llorar -quiero...saber toda la verdad, necesito escucharla de ti-

Nunca había tenido una amiga real, ni mucho menos un novio, pero sí sabía una cosa: los amigos son por sobre los amores.
Alexia era mi amiga y por mas que el sufrimiento me invadiese no podía ver de otra forma a Ranmaru como el que le rompió el corazon a mi amiga.

Algo en mi se quebró ¿por qué, por qué?. Las lágrimas brotaron en mi.

De pronto llamaron a la puerta y Alexia la abrió. Ranmaru entró abruptamente en la habitación y se dirigió a mi, implorando que lo escuche, pero yo no podía mirarlo. Sólo podía mirar a Alexia en busca de su aprobación.

Al cruzar la puerta se dejo caer en el sillón tras escuchar que comprobé lo dicho anteriormente por Ranmaru, al menos no quiere negarlo al contrario mió que solo deseo olvidarlo, me senté a un lado de ella y acaricie su cabeza atrayendo la hacia mí mientras la abrazaba.

-Si te gusta no me importa, si realmente quieres odiarlo está bien, pero no te hagas daño por algo que ocurrió hace años. Haz lo que te haga menos daño, de todas las personas tu eres la única que no quiero ver sufriendo-

Me miro luego de un momento y me pidió contarle lo que había sucedido, pues anteriormente se lo mencione, únicamente mencione que por culpa de mi ex-novio Alix despertó más no dije nada más. Respire 
tranquilizándome y me senté de otra forma viendo de frente a Cherice.

-No ahí mucha diferencia entre lo que te dije ese día, si Ranmaru y yo nos conocimos y empezamos a salir cuando entre a la secundaria, estuvimos saliendo por tres años y...-

Escuché que tocaban la puerta, y aunque pude ver que Cherice empezó a llorar no tengo palabras ahora para consolarla así que me pare para abrir la puerta, solo viendo una roja cabellera entrar veloz mente por 
la misma y tomando rumbo hacia dónde estaba Cherice, me pareció haber vuelto en el tiempo pues le imploraba a Cherice escucharlo, exactamente igual que el momento en el que terminamos, mordí mi labio a tal grado que lo hice sangrar sentí la mirada de 
Cherice esperando a que le diera mi aprobación para algo.

-Has lo que creas mejor-

No pienso hacer o decir algo que haga infeliz a mi amiga, si tiene un sentimiento hacia Ranmaru no tengo por que intervenir, después de todo yo termine con él.

Solo la vi cruzar la puerta, nada más, mi mente era un caos total tenía unas ganas tremendas de gritas, de golpear algo y sin embargo cuando veía algo que golpear no podía, no tengo idea de que pasa con mi mente y eso mismo me pone estresado.

Di vueltas por mi sala durante unos momentos el sonido de la bateria tenía sonando un tiempo, eso solo podía significar que Alexia también buscaba como desahogarse y de prontó paro, Cherice-san seguramente ya había llegado a su casa y la había invitado a entrar.

Un nudo se creo en mi estomago el saber lo que posiblemente pudiera decirle Alexia a Cherice... de una u otra forma no quiero... no deseo que ella se enteré de lo que ocurrio en el pasado, quiero que siga
siendo un misterio para ella algo que nunca podrá saber... me doy asco por estar pensado de está forma.

Salí de mi apartamento tomando el elevador rumbo al ultimo piso cada vez que veía los números subir me sentía más intranquilo algo me decía que si no me apresuraba a llegar posiblemente lo lamentaría.

Me desesperé al llegar al piso quince me baje del ascensor y comencé a correr no se como lo hice, ni como ocurrió pero cuando recobré el aliento ya me encontraba frente a su puerta esperando a que me abriera, lo cuál fue bastante rápido en cuanto la puerta se abrió automáticamente fui a dónde se encontraba Cherice-san, lo único que atine a hacer fue pedirle que me escuchará, supuse Alexia ya le habría dicho el motivo por el cuál terminamos y de no ser así...quiero dejarlo de esa forma, sonaré egoísta y mucho más... pero no deseo que lo sepa. No se muy bien por qué, pero no quiero que lo sepa.

Mi corazón latía a mil revoluciones, Ranmaru buscaba mi mirada y Alexia me susurró que hiciera lo que sentía.

No pude evitar verla moderse el labio, sintiendo como algún remordimiento la invadía. Estaba entre la espada y la pared.

VAMOS HAZLO DICELOS, DILE QUE NO QUIERES VOLVER A VERLO, DILE QUE TU AMIGA AUN LO AMA Y QUE NO QUIERES VOLVER A VERLO DILO

La presión del momento y la tensión me invadía -yo.yo..Non posso dire!- la garganta se me cerro y no pude hablar. Sólo hice lo mejor que sabía hacer.
Con el corazon roto, el nudo en la garganta y lágrimas en mis ojos me puse de pie y salí corriendo de allí. Abrí la puerta corriendo, no quería esperar el ascensor.
Se que alguien gritó mi nombre, no se si fue uno o ambos, sólo bajé corriendo.

Muy agitada y sin aliento salí del edificio. No me importaba estar sin calzado, con una remera y una falda corta y rasgada, con el pelo suelto y revuelto no me importaba nada.

Corrí tal cual lo hice esa noche, llorando, lejos mis problemas. Mi tobillo anteriormente esguinzado comenzó a dolerme pero seguí corriendo hasta el parque. Cuando llegué puse mi brazo en mi estómago para recuperar el aliento y me dejé caer en uno de los columpios. Miré hacia la luna en busca del aliento, en busca de mi hermano, pero las lágrimas brotaban y brotaban, aqui fue donde lo conocí, el día que me condené.

Jamás creí que el dolor de un desamor era tan grande, tan cruel.

Al cabo de un rato, comencé a sentirme mejor pero no paraba de llorar, necesitaba descargar esto que sentía. La rabia, las ganas de volver a mi país y encerrarme en mi cuarto sin salir jamás.

El sonido de los grillos invadió la noche tranquila. Sabía qué era lo que necesitaba hacer, comencé a caminar al único lugar donde me podía sentir plena. Una sala de música.

De pronto vi que de mi cuello cayó una flor, el collar que me había armado Alexia, lo arranque y lo dejé caer al suelo, despues de todo ¿quien pensaría que era mio? ¿quien me buscaria?

Solo la vi salir corriendo, lo más seguro es que iría a buscar su propio espacio para entrar en calma, escuche a Ranmaru gritar su nombre sin embargo dudaba, dudaba de si iría o no tras ella lo cuál no es normal en él, fui a mi habitación y regrese tomando la mano de Ranmaru y dejando en ella una pequeña caja.

-Solo buscaba una forma de devolvértelo, ya que no pude antes. No se que es lo que te piensas tanto... podre no ser la mujer más femenina del mundo, pero seré una tonta para no darme cuenta de que te gusta-

Me di la vuelta recogiendo mi cabello pues me empezó a cansar dejarlo suelto, al igual que como había hecho anteriormente con un simple movimiento de cabeza le indique a Ranmaru que debía ir a por ella, aunque quería ser yo quien la consolará lo mejor es que lo haga él.

Seguí mi camino nuevamente a mi habitación tengo planeado recostarme a dormir un poco, puede que mis acciones hayan malinterpretado la situación y pese a ello mi amiga piense que aún siento algo por Ranmaru, ciertamente, aunque no es algo afectivo lo que le tengo, no lo odio pero tampoco lo quiero o algo semejante, simplemente le tengo un afecto amistoso ahora.

Creí haber escuchado que la puerta se cerraba al cruzar la puerta me tumbe en mi cama cubriendo mis ojos con el ante brazo supongo esto es lo que se gana al tener amigos de verdad. "¿Entonces... prefieres verla a ella estar junto a ÉL que tenerlo para ti una vez más? Ella lo quiere y él también siente algo por ella, me convertiré en un monstruo de verdad si me conformo viendo a mi amiga sufrir por un desamor, que en realidad no es un desamor."Te han suavizado... en un pasado no te hubiera importado En un pasado... yo vivía temiendo de que engañaran, ahora esta en mi poder alejarlas o conservarlas, y es justo lo que haré con mi amiga.

Cuando salió corriendo fue cuando logre captar que ni siquiera había terminado de contarle lo ocurrido, grite su nombre tan fuerte como pude... pero dudo que vaya a regresar por un momento decidí ir a por ella pero no sabría que podría suceder, temía que ella no quisiera volver a verme nunca jamás, y fue en ese momento en el que Alexia dejo en mi mano una caja cubierta de tela, al instante la reconocí y por eso mismo la mire sorprendido, y más cuando dijo que solo buscaba una forma de regresármela. Y en ese mismo momento me di la vuelta y comencé a correr para ir por ella.

No me importó si Alexia vendría o no, solo había una cosa invadiendo mi mente y esa era decirle la verdad de una vez por todas a Cherice, si no lo hacía probablemente realmente la perdería, corrí tan rápido como pude llegando al parque dónde la conocí, dónde por primera vez pude admirar esa bella sonrisa que me ha cautivado una y otra vez, mire a mi alrededor sin poder ver alguna señal de ella, hasta que pise algo, su collar que unas horas atrás Alexia había hecho para ella, debe estar cerca, eso seguro. Mire frente a mí y pude divisar muy tenuemente la universidad... Ahora veo por que la sala de música estaba vácia Alexia ¡Eso es! La sala de música recordar sus palabras me dio su ubicación una vez más empecé a correr intentando alcanzarla, nisiquiera había llegado a la entrada de la universidad cuando la ví camino hacía allá, mi respiración se volvió entre cortada y nuevamente aceleré el paso hasta llegar a dónde se encontraba, habiendo llegado a su lado hice lo primero que se me ocurrió.

La abrace tan fuerte por detrás que sentía que por muy poco que aflojara mis brazos ella saldría corriendo -Por favor... por favor no te vayas...no me dejes- Hundí mi rostro en su hombro respirando su perfume -No quiero perder a la chica que me gusta... por favor... no te vayas- Ligeros espasmos invadieron mi cuerpo, y lo pude notar tenía miedo, miedo de verdad de que pudiera marcharse, miedo de que pensará que entre Alexia y yo podía suceder algo nuevamente.

Comencé a caminar rodeando el parque, el bosque, el lago. Esos malditos y condenados lugares que me hacían sentir tan mal, camine descalsa por la calle cuando pasé frente a una vidriera y me vi reflejada en ella. Parecía una muñeca de trapo con los puntos de sutura en mi brazo los cuales tenía ganas de arrancar con mis dientes. Me sentía un zombie.

Finalmente llegué a la sala de música, la universidad ya estaba vacía, entré en ella y me acerqué lentamente al teclado. Un recuerdo vino a mi mente, una vieja melodía que compuse con mi hermano cuando la chica del parque le rompió su corazon.

De pronto, toqué un compás estandar que reproducía el teclado y comencé a desahogar lo que sentía.


Luego de tocar la melodía sentí que pude despedir esa agonía que sentía. Me levanté y fui a tomar un baño a las duchas del gimnasio, aún olía a sangre. Al salir, me di cuenta que era hora de ir a casa, Salí del institulo, incluso sin calzado cuando lo alguien me tomó por detrás.

Me congelé no pude reaccionar ante él, jamás me esperé que fuese él quien tenía detrás suplicando que no me fuese de su vida, que ¿yo era la chica que le gustaba? no, no otra vez las lágrimas. No podía reaccionar lo que dije simplemente fue sin pensar.

Aparte sus manos de mi cuerpo y me puse frente a el -¿por qué? ¿por qué estás aqui y no estás con Alexia?- no lo entendía. Por qué la gente corría detrás de mi.

De pronto sin que me dejase reaccionar se acercó una vez más a mi y posó su frente en la mía susurrándome algo.

No sabía que hacer o cómo reaccionar - lo siento, no puedo- dije -quiero que...que me dejes!- no pude creer que me armé de valor para decírselo.
Caí de rodillas ante él llorando como una niña sin consuelo. Que tonta me sentía.

Rol off: dejo la traduccion de la letra del tema
Cuando tomo la palabra
Como lo he hecho muchas veces antes
Me siento un cambio que me pasa
Tengo una emoción
Se siente como si el tiempo se queda quieto
Y luz de estrellas es el único que veo

Cuando somos sólo yo y la música,
Dejo atrás el mundo
(Sólo yo y la música)
Cuando somos sólo yo y la música
Soy libre!
Soy poesía en movimiento
Cuando somos sólo yo y la música

Mi corazón comienza a correr
Voy volando en el espacio
Y la música es lo único que oigo

Cuando somos sólo yo y la música,
Dejo atrás el mundo
(Sólo yo y la música)
Cuando somos sólo yo y la música
Soy libre!
Soy poesía en movimiento
Cuando somos sólo a yo (sólo yo) y la música

Sentí que apartaba y me miraba fijamente, exigiendo saber por que no me encontraba con Alexia, negué levemente acercándome a ella lo suficiente para poder juntar su frente con la mía.

-Por que ella me quiere fuera de su vida, me lo dejo muy en claro hace tres años- Escucharla pedirme que la dejara fue algo que una parte mía no termino de creer, me arrodille frente a ella tomando su rostro una vez más para que pudiera verme mejor.

-Lo más seguro es que ella no terminará de explicarte lo que pasó ese día por que llegué- Limpie las lágrimas que caían por sus mejillas usando la yema de mis dedos -
Cuando terminamos fue unos días antes de su cumpleaños, una de sus compañeras de clase quería orientarme sobre un buen ragalo para ella... sin que yo me lo pudiera esperar repentinamente me besó y esa fue una escena que Alexia vió. Es alguién sumamente orgullosa y debido a ello jamás quiso escuchar mi explicación.Fue ella quien termino nuestra relación-

Espere unos momentos para ver su reacción, al parecer no quería creer mis palabras.
Volví a abrazarla para consolar aquel llanto que seguía liberando. De pronto me sentí un poco más tranquilo pues había sido honesto con ella, y supuse que se debía al hecho de haber aclarado aquella situación. Me separé un poco para verla mientras esbozaba una sonrisa -Aunque me obligarán a volver con ella, es imposible, pues ahora ahí alguien más que me importa-

Temblaba de la cabeza a los pies realmente no comprendia nada. Era como estar en una de esas peliculas romanticas. Por alguna extraña razon me costaba creer en sus palabras, eran muchas cosas en tan poco tiempo.

Alguien mas que le importaba? me sonroje al decirme esas palabras pero muchas dudas estaban en mi mente, no sabia si averiguarlas por separado o juntarnos una vez mas los 3. -yo no quiero lastimar a Alexia, ella es mi amiga- dije mirandolo directamente a sus bellos ojos grises.

Nuestras miradas se cruzaron por un largo minuto, el dijo algo y se acerco una vez mas a mi hasta que pude sentir su respiracion cerca a la mia.
Nu-nunca habia besado a nadie y mi reaccion fue automaticamente volverme hacia atras -necesito pensar, lo siento- finalmente dije y me puse de pie como pude -ay!- correr sin calzado luego de recuperarme de un esguince no fue buena idea. lleve mi mano a mi tobillo, que me dolia por la relajacion de los musculos.


No me falles pie, no ahora. A pesar de todo no pude evitar pensar que estaba haciendo Alexia en ese momento, y sobretodo, que pensaria Alix de ello.

Simplemente miraba por la ventana que daba en dirección al campus y así mismo a la universidad, había cambiado mis ropas por unas de cuero de las cuales colgaban mis cadenas y a los costados una daga, aun cuando no pudiera ver lo que sucedía sabía que posiblemente estarían frente a la universidad pues Cherice posiblemente fue a tocar el piano.

Desvié un poco mi vista viendo mi propio reflejo el cuál visualice a Alix, quien claramente tenía un semblante molesto y este era oculto por el flequillo, no dije nada simplemente me limite a volver a ver la ventana.

-Deja de mentir, estás enojada por lo que hice- Me gire a verla -¿O realmente creías que no me iba a dar cuenta de que esa semana entera que pase llorando era realmente yo?-

Note como se tensaba y dejaba de mirar al mismo lugar que yo, lo sabía perfectamente, durante mucho tiempo lo supe, que ya tenía una doble personalidad, pues en ocasiones olvidaba completamente lo que había hecho o dicho, "Cállate...lo único que hacía era cuidarte..." Si eso querías ¿Por que insultaste a papá? No hubiéramos entrado al accidente de no ser por que interviniste, ambos estarían vivos, y por ende, jamás hubiera conocido a Ranmaru. "Supongo vas a culpar mi rara habilidad de ver cosas. Pues no lo hice por esa razón"

Salí del edificio tomando rumbo hacia dónde ambos se encontraban, Cherice no iba muy cubierta y Ranmaru no tiene nada con lo cuál realizar su papel de príncipe y taparla, en ese silencioso tramo solo escuchaba el débil sonido de mis propias cadenas, al llegar dónde ambos estaban, al parecer Cherice se había caído  me acerque a ella ofreciéndole una chamarra y extendiéndole mi mano para ayudarla 
a parar y cargarla en la espalda. "No entiendo por que ayudarla ella va a arruinar tu vida" Guarda silencio.

Solo admire la belleza de Cherice-san antes de dejarme llevar por mis propios impulsos lo cuales fueron besarla a pesar de que casi al instante se había apartado supongo yo fue por mi acción tan repentina, quise acercarme a ella en el momento en el que se puso en pie sin embargo Alexia había llegado.

Con su ayuda regresamos a su apartamento pues era ya bastante noche para dejar
que Cherice-san fuer a su casa, llamo a su primo avisando que se quedaría con ella, cuando llegamos me di cuenta algo parecía como si hubiera reorganizado sus cosas en el tiempo que no estuvimos... sigue siendo un poco obsesiva.

iba a decir algo pero tomo mi mano y me guió hasta su habitación dejándome
caer en la cama, esbozo una sonrisa que no era una buena señal y repentinamente cerró la puerta con llave dejándome encerrado. -¡Hey! Déjame salir, no puedes encerrarme cuando te plazca- La escuche decir unas palabras pero no entendí bien cuales, simplemente de un momento a otro siento que empezó a charlar con Cherice-san.

Supongo ahora va a terminar de dar su versión de lo que sucedió.

Cuando Alexia llego ambos me ayudaron con mi pie y fuimos al apartamento de Alexia, avisandole a Castiel que me quedaria alli. Ciertamente se enfado mucho por la hora en que lo desperte. Suspire.

Al llegar Alexia fue a buscar una fuente de agua tibia a la cual le puso sal. Viejo remedio para tratar la hinchazon. Antes de posar mis pies sobre el, pase al baño a limpiarmelos un poco aun no comprendo por que sigo descalza.

Cuando sali del baño vi que Alexia cerraba la puerta de su habitacion y decia algo. Cuando preste mejor atencion pude escuchar los gritos de Ranmaru. Ella lo habia encerrado.
No pude evitar reirme ante aquella situacion -no crees que es un poco cruel de tu parte?- dije con mi sonrisa mientras me sentaba en el sillon posando mi pie herido en el agua tibia.

Alex se poso a mi lado en busca de caricias comence a acariciarle la oreja. Mire el reloj, las 2 am y la noche no acaba. -Ranmaru me conto su version de lo que ocurrio. - hice una pausa. La voz de mi hermano resonaba en mi cabeza "recuerda siempre escuchar las 2 campanas de una historia antes de tomar una decision" -ahora es hora de que me digas la tuya- Le dije a Alex. Aun podia escuchar a Ranmaru quejarse desde la habitacion de Alexia lo que a ambas nos dio un poco de risa. Pero no pude evitar sentirme mal por el. A pesar de todo lo ocurrido y lo que pudiese llegar a ocurrir, me gustaba, y me preocupaba por el.

Al cabo de un rato que ambas conversabamos ella decidio dejarlo salir de la habitacion mencionando que a partir de ahora la decision se encontraba en mi. No comprendi del todo esas palabras. Solo se que ella me saludo con su mano y fue a "dormir" cerrando la habitacion con un cerrojo. Se que Alix no estaba muy contenta con todo esto.

Mire una vez a Ranmaru que estaba algo fastidioso hasta que nuestras miradas se encontraron -hola..- dije con una sonrisa timida y algo melancolica.

Habiendo llegado a mi apartamento prepare un un poco de agua tibia para Cherice, y la inflamación de su tobillo, deje fuera del baño un par de pantuflas para que no este pisando el suelo frío luego me dirigí hacia Ranmaru quién encerré en mi habitación ignorando sus constantes quejas.

-Necesito hablar con ella a solas Ran-tan~-

Reí ante mis ultimas palabra suponiendo las reacciones que pudo haber tenido en ese momento, ante la mirada de curiosidad de Cherice.

-No le importa-

Bromeé cuando iba a sentarme, esperando a que se acercará Cherice, y a pesar de estar un poco lejos seguía escuchando a Ranmaru quejarse por haberlo encerrado en mi cuarto... ¿Debí haberlo hecho en el baño o en otro lado? No importa, pues sabía perfectamente que Cherice quería escuchar mi parte de la historia.

-Muy bien, creo que sería bueno si de una vez te informo que Alix siempre a existido, solo que estaba por así decirse dormida. Cuando terminamos fue en mi ultimo año de secundaria, unos pocos días antes de mi cumpleaños... ahm... hasta dónde sabía Ranmaru planeaba una fiesta o algo así, no recuerdo bien, pero el caso es que una compañera mía me dijo que tenía una hermosa sorpresa para mí, que la viera al terminar la jornada en las canchas detrás del gimnasio, en ese entonces todavía confiaba en las personas por lo que fui muy obedientemente...sin embargo cuando llegué no fue nada bonito lo que vi, era mi "supuesta" mejor amiga besando a Ranmaru quién debido a su amabilidad no puso resistencia, en un principio iba a escuchar su explicación... pero Alix se movió antes que yo, y despertó completamente hecha una furia no tengo idea de que sucedió pero cuando recuperé el control de mi cuerpo lo único que podía ver era a Ranmaru completamente molesto, inclusive gritándome... yo estaba molesta, por que no tenía idea por que hacia eso, entonces 
termine con él. Al día siguiente ni siquiera me miraba, si lo cruzaba lo único que obtenía eran miradas por sobre el hombro-

Me gire a verla mostrando una leve sonrisa luego me puse en pie y deje salir a Ranmaru de mi cuarto, haciéndole saber que ahora la decisión estaba en el poder de Cherice, y luego me gire a verla sonriendo afirmando que iba a dormir para poder encerrarme en mi cuarto y dejarlos hablar tranquilamente.

En cuanto pude salir de la habitación de Alexia me gire hacia Cherice-san la cuál me había saludado tímidamente. Me acerque a ella sentándome a un lado suyo en el sillón, para poder platicar durante un tiempo, sobre lo que había sucedido en el pasado, sobre
lo que sentía yo hacia ella, inclusive sobre lo que sentía ella hacia mí.

Me sentí bastante relajado cuando hable con ella, aclarando las situaciones que tanto a ella como a mí nos mantenían confundidos sobre lo que podría suceder a continuación. Llegó un momento en el que Cherice-san preguntó que era lo que sentí hacía ella -Atracción, afecto, aprecio, cariño, amor- Fue mi respuesta mientras acaricia sus mejillas esperando la respuesta sea cual sea que pudiese darme.

Permanecía callado mientras esperaba su respuesta, pacientemente sin dejar de ver sus mejillas sonrosadas.

Creo que si seguía teniéndolo tan cerca mis mejillas se camuflarían con mi cabello. De pronto al escuchar sus palabras me sentí un tanto paralizada Atracción, afecto, aprecio, cariño, amor. Creo que en mis 18 años de vida nunca nadie me dijo que sentía eso por mi. Excepto amor, el único que tenía ese sentimiento por mi era mi hermano, pero no creo que estemos hablando del mismo tipo de amor.

Tener su mirada sobre la mia me ponía mas nerviosa! diablos! era tan mala para estas cosas y Alexia no estaba cerca para poder ayudarme. Desearía tener un hada madrina o algo así. -ehm no se que decirte... - estaba muy nerviosa -no soy buena para estas cosas, es mi primera vez - desvié mi mirada pero él la atrajo nuevamente al agarrar mi menton de una forma dulce y suave haciendo algo que realmente no me esperaba.

Mi corazón latía al ritmo del segundero del reloj. Las 4 am. El día se me había ido volando y la noche también. Ambos nos quedamos dormidos en el sillon de Alexia abrazados el uno con el otro. A mi me despertó una pesadilla sobre mi hermano, mi futuro, mis amigos.

Tomé la fuente de agua y temblando la llevé hacia la cocina para lavarla. Estaba aun muy nerviosa y no comprendía si todos los acontecimientos ocurridos eran un sueño o la realidad. Los puntos en mi brazo están, por lo tanto, debió ser real.

Estaba empapada en sudor cuando escuche un cerrojo abrirse, una somnolienta Alexia se levantó preguntándome qué hacia despierta. Se ve que se había quedado dormida.

Se sorprendió al ver mi estado y preguntó cómo me encontraba mirando hacia donde estaba Ranmaru con resentimiento -no es su culpa, tuve una pesadilla, desde la muerte de Blake las tengo no he dormido una noche completa en años- suspiré

Lo que sea que haya sucedido mientras estaba en mi cuarto permanecerá como un secreto hasta que salga o de lo contrario le pregunte directamente a Cherice que sucedió, me había recostado en mi cama mientras escribía una canción cuya letra tenía desde hacía un tiempo en mi mente, al cabo de un rato me había quedado dormida.

Y sin saber como me encontraba rodeada de personas, había ruido a mi alrededor, mucho, mucho ruido, personas gritando, niños llorando, madres alteradas... pero sobre todo fuego, todo estaba rodeado por Fuego, yo corría una y otra vez buscando un lugar en especifico, la fuente de todo ese caos infernal. El auto dónde mis padres seguían atrapados. -¡Mamá, papá!- Aún si estiraba mis brazos para alcanzarlos, alguien llegaba y me alejaba de ellos, eran los bomberos que no podían salvarlos -¡Papá! ¡Por favor papá! Salgan de ahí!- Las lágrimas habían comenzado a salir de mis ojos, me dolía la garganta por el humo y por seguir implorando a mis padres vivir, estaba furiosa, furiosa conmigo misma por haberles dicho algo horrible momentos atrás, -¡Papá, Mamá no los odio! Así que... por favor... por favor vamos a casa- Sin importarme las quemaduras que pudiera obtener me había metido al auto para intentar sacar yo misma a mis padres de ahí, lloraba y no lo iba a negar solo quería que me abrazaran una vez más y me dijeran que yo era su princesa, que gracias a mí sus vidas eran felices, quería volver a casa, a casa dónde todos nos esperaban, -Ale..xia dulzura... te amamos... p-por eso... sálvate Los brazos de los bomberos nuevamente volvían a alejarme de ellos, ¿Por qué? ¿Por qué a mi padres?-¡MAMÁ!- Mi garganta se destrozo luego de aquel momento

Desperté agitada, sudando y con mi rostro lleno de lágrimas al igual que todas las 
noches, siempre soñaba lo mismo, siempre recordaba como deje morir a mis padres sin poder hacer nada, me senté en la cama limpiando mi rostro y con ardor en la 
garganta, por lo que supongo también grite... salí de mi habitación rumbo a la cocina para tomar un poco de agua, al salir vi a Cherice despierta le pregunte que había pasado, pero casi al instante fije mi vista hacía Ranmaru molesta, ella dijo que había sido una pesadilla y eso me hizo calmarme un poco.

-Vaya, no soy la única con pesadillas que roban el sueño-

A fin de cuentas no logre llegar a ningún acuerdo con Cherice-san de tal forma que nos quedamos dormidos en el sillón, menos mal que era un sofá-cama y de esa forma no tuvimos que quedarnos apretados ni con complicaciones, la madrugada seguía corriendo sin embargo yo estaba despierto, y sin poder conciliar el sueño, no podía girarme pues Cherice-san estaba abrazada a mí.

Deje de hacer esfuerzos por dormir luego de un tiempo y preferi tomar un sueño de perro, de esa forma podría descansar pero no me quedaría completamente dormido, sentía la respiración de Cherice-san muy cerca mió en cierta forma me tranquilizaba aunque me ponía los pelos de punta también. No paso mucho ante de que escuchara un grito desgarrador, gire un poco la cabeza hacía el cuarto de Alexia... mat' ¿Por qué gritaría por su madre sabiendo qué...? Ah, creo que ya comprendo.

Casi al instante Cherice-san se levantó, y supe que había tenido una pesadilla pues en una ocasión me lo había comentado, que desde la muerte de su hermano, rara vez dormía toda la noche, seguido salió Alexia de su habitación y me sorprendió su estado, parecía como si hubiera visto a la muerte, todo su cabello lo tenía enredado y sus ojos estaban un poco hinchados y con ojeras. Me levanté dirigiéndome a ambas. -¿Todo bien Cherice-san?- Solo quiero comprobar que tal se encuentra, se el por que se despertó, pero quiero asegurarme de que está bien, luego me volví a Alexia -Ahm...¿Todo... en orden?- Me quede
callado esperando su respuesta, sea cual sea.

suspire ante el comentario de Alexia cuando Ranmaru tambien se levanto preguntandonos como nos encontrabamos.

Me sonroje al verlo y recordar lo comodo que se sentia dormir con mi cabeza apoyada al su pecho. Tome la cafetera de Alexia y prepare algo para tomar mientras Alexia hablaba con Ranmaru. Alex paso al baño a arreglarse y Ranmaru comenzo a ayudarme -no tienes que hacerlo- dije mientras se me caia todo de las manos. Aun las tenia temblorosas por la pesadilla. Ran tomo mis manos y menciono algo que me dio mucha calma. Respire hondo y lo abrace -grazzie- susurre a su oido y acto seguido bese su mejilla como lo hice la primera vez.


Alex volvio y tomo asiento y yo me sente con ella acercandole una tasa de cafe, mientras me sentaba a su lado Ranmaru me acompaño. -creen que tenga posibilidad de entrar aun a la universidad? digo, solo herimos un pervertido no es gran cosa - los 3 nos quedamos un momento en  silencio y comenzamos a reir. Algo que descontracturo mucho el momento